Capítulo 26 - La paz de los Bakugo

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Al día siguiente me despierto pronto. He quedado para ir a correr y a entrenar en la playa con Izuku. Sigo sin dirigirme la palabra con Katsuki. Al volver a casa a medio día exhausta, me dirijo a mi baño y me doy una ducha, al salir me encuentro a Katsuki sentado en mi cama. Me asusto y pego un brinco al verle.

— ¿Qué haces en mi habitación?

— ¡¿Qué más quieres que te diga, Haiyoru?! ¡No te iba a dejar ganar solo por ser mi hermana! ¡Que tengas problemas de autoestima no es mi problema! — Mi hermano explota. Parece haberse estado conteniendo desde ayer.

— Ah... con que por ahí quieres que vaya la conversación, ¿no? Soy la única que tiene poca autoestima de los dos, ¿cierto? Me pareces un hipócrita. ¿Acaso te crees que no te conozco? ¿Acaso te crees que no sé que en realidad sientes que eres inferior a todo el mundo aunque pretendas decir que eres el mejor? Que me critiques y digas que deje de ser autoexigente conmigo misma y mi comparación con otros es hipocresía. Tú haces exactamente lo mismo. — Cada palabra la escupo con rabia. Él no es el único que se ha estado conteniendo. Se levanta y se acerca a mí enfadado.

— ¿Yo? ¿Sentirme inferior al resto? Haiyoru, no tienes ni idea de lo que dices. — Me río con amargura.

— Increíble. Ni siquiera lo quieres admitir para ti mismo. — Lo miro desafiante. Él frunce el ceño y abre mucho los ojos.

— Bien, ¿quieres que lo diga, entonces? ¿Admitir que ambos tenemos una autoestima de mierda? ¿Así te atreverás a dirigirme la palabra y dejar de lado este berrinche de niña pequeña?

— ¡¿Niña pequeña?! ¡Aquí el que se comporta como un inmaduro eres tú, explotando por cualquier tontería!

— ¡Dios, Haiyoru! ¡Solo he venido para tratar de disculparme, y tú solo te estás enfadando más! ¡Qué complicada eres!

— ¡Tú eres el que se disculpa como el culo!

— ¡Bien, lo siento! ¡¿Contenta?!

— ¡¿Te crees que un simple "lo siento" va a solucionar las cosas?! ¡Llevo toda la vida así, Katsuki! — Me acerco más a él, gesticulando con rabia y dejándome la voz, siento que las lágrimas se acumulan en mis ojos. — ¡Desde que éramos pequeños! "Ah, Haiyoru, la hermana del famoso Bakugo del colegio", "Es solo un estorbo más", "¿Haiyoru también tiene que venir? Sólo es el complemento de Bakugo y molesta". — Pongo la voz aguda, imitando a niños pequeños. — ¡Toda mi vida he tenido que escuchar cosas así! ¡Actuaba como si no me afectaran, como si fuera gracioso! ¡¿Pero sabes qué?! ¡Sí me afectan! ¡Todas las veces que me han rechazado y me han tomado como un accesorio irritante de mi increíble hermano Katsuki Bakugo siguen presentes en mis recuerdos, toda la vida me han tenido que recordar que no sería capaz de superarte! — Las lágrimas empiezan a caer por mis mejillas. Golpeo a Katsuki con rabia en el pecho. — ¡Así que no! ¡No te perdono! — Mi voz empieza a entrecortarse y empiezo a sollozar. Katsuki me rodea con sus brazos y yo me dejo. Después de gritarle, me he tranquilizado, y solo quedan las lágrimas. Me sigue abrazando hasta que consigo calmarme un poco.

— Los dos somos un desastre, ¿lo sabías, no? Tú eres mejor que yo en muchas cosas. Se te da mejor hablar con las personas, comprenderlas, consolarlas. Yo no. Te ha tocado un hermano terrible para hablar de sentimientos. — Me río ligeramente. — ¿Ahora te ríes? Eres un poco bipolar, ¿lo sabías?

— Cállate. Quiero que repitas eso de que soy mejor que tú en muchas cosas.

— Ni de coña. — Vuelvo a reír. Así suelen ser nuestras discusiones, desde que éramos pequeños. Uno se desahoga y el otro trata de hacerle reír cuando se calman. Supongo que esta es la extrañan manera de hacer las paces para los Bakugo.

Haiyoru Bakugo - TEMPORADA 2Donde viven las historias. Descúbrelo ahora