°[𝑨𝒆𝒕𝒆𝒓𝒏𝒖𝒎]°

𝐂𝐚𝐩.𝟑𝟕

*5 años después*

Veía a mi pequeña Aemma correr por el patio del castillo, Luke se encontraba jugando con ella, mi pequeña ya tenía 5 años, los primeros meses con ella fueron muy difíciles, no sabia como tratarla, que tenia que hacer y por más que la reina me ofrecía dejarles ese trabajo a las sirvientas me negaba, no dejaría que otras personas hicieran mi trabajo, con el tiempo pude comprender que hacer y hasta el momento estaba haciendo un buen trabajo.

Con respecto a Aemond y nuestro matrimonio, pues todo iba de mal en peor, todo el pueblo conocía a la amante oficial del que es mi esposo, Lysa Penzi, ese era el nombre de la amante, Aemond le había otorgado un trabajo en el castillo para tenerla mas cerca, lo cual al principio nos molesto a todos, pero con el paso del tiempo aprendimos a ignorarlos a ambos, claramente todos querían echarla del castillo, pero siempre volvía, el pasaba tiempo con su hija, a mi espaldas claramente, pero me entere por una sirvienta, no me queje porque al fin de cuentas el es su padre, no podía alejarlo por mucho tiempo de ella.

−mami estoy cansada, jugar con el tío Lucerys me agoto, aparte es muy fácil ganarle−la voz de mi pequeña me hizo bajar la mirada a ella, era idéntica a su padre sinceramente.

−eso no es cierto, yo solo te dejaba ganar pequeña−replicó Lucery en su contra con el ceño fruncido, pero con una sonrisa, ambas nos miramos y estallamos en risas, Lucerys no era un buen perdedor−oh claro, ríanse de mí, es obvio que me tienen envidia porque soy bueno jugando a este juego.

−lo que te dejé dormir por las noches Luke−dije con gracia, el me dio una mala mirada.

−cariño ¿por qué no vas a buscar a Jace y le dices que te enseñe un poco de Valyrio? Necesito hablar con tu tío un momento−pedí amablemente, ella me dio un asentimiento y salió corriendo.

−vamos a un lugar privado Luke, no podemos hablar de esto en público.

Ambos nos dirigimos a una pequeña oficina que tenia el, se la habían cedido hace 2 años por su título, allí se encontraban varios libros, cartas, entre otras cosas, el cerro las puertas a mis espaldas asegurándose que nadie pudiera escuchar, reviso las paredes debido a los pasadizos y cuando estuvo seguro que nadie escucharía me dio un asentimiento para que comenzara.

−tenemos el apoyo de 6 de los 7 reinos, el reino de las Tormentas no quiere ser participe por lo que no contamos con ellos, pero si con los demás, tenemos a las ciudades libre y en caso de ser necesario, a los peldaños de pierda−comente mientras me apoyaba con mis manos en la mesa frente a Luke, el me miraba atento a lo que decía.

−seria un caso perdido tratar de convencer a Bastión de Tormentas, asi que mejor descartémoslos, con los reinos que tenemos y las ciudades libres es suficiente para detenerlos, de lo que nos tenemos que encargar ahora es de los dragones−puntualizo Luke rodeando la mesa hasta estar a mis espaldas, pero sin tener contacto.

−tienes razón, hay que encargarnos de eso ahora, yo cuento con cuatro dragones, mas el tuyo y el de Jace van dos más−me detuve al sentir sus manos posarse en mi cintura y su aliento acercándose a mi oído.

−continua, quiero escucharte.

−contamos con Sunfyre y Dreamfyre, no sabría decirte si contamos con Vaghar−dije como pude al sentir como repartía besos en el hueco de mi cuello−el dragón de Aemma es muy pequeño para la guerra asi que tendremos que tratar de domar a los que están sueltos, atraparlos en las cuevas y...por favor Lucerys, basta−pedí mientras intentaba separarme, pero su agarre no me lo permitía.

− ¿Por qué quieres que me detenga? Hace 5 años no te toco como quiero Daenys, es una tortura, Recuerdo como antes disfrutabas de mis besos, mis caricias−murmuro en mi oído, autocontrol por favor ven a mí.

−eso era antes, cuando no tenía una hija, cuando no respetaba tu matrimonio, ahora lo hago, o eso intento, íbamos bien Luke, cada uno enfocado en su matrimonio, no eches eso a perder−dije logrando por fin separarme de su agarre.

−tú sabes perfectamente que te sigo amando Daenys, con la misma intensidad que el primer día y siempre será asi y no podrás cambiarlo−dijo firme y serio, el ya no era el pequeño Luke que conocía, ahora es todo un hombre.

−Luke, yo...−unos golpes en la puerta me hicieron detenerme y lo agradecía, sabia que estaba por rendirme, bajar mis barreras y entregarme a él, tal y como él quería.

−esta conversación no se quedará asi Daenys, tu y yo necesitamos hablar y lo sabes−tras decir eso se dirigió a abrir la puerta revelando a Jace.

−Daenys, Aemma te busca, dice que quiere que la bañes y le hagas unos peinados que solo sabes hacer tú, dijo que esperaba en la habitación−comento con confusión en su rostro, no sabia si era por los peinados o por verme con Lucerys, ambos solos en su oficina.

−bien, gracias por avisarme Jace...hasta luego chicos−dije pasando por el lado de Jace a paso rápido.

− ¿Qué hacían tu y Daenys solos en tu oficina? −escuché a Jace preguntar.

−solo conversábamos Jace, tranquilízate−luego de eso solo logre percibir murmullos y segundos después solo silencio.

No podíamos continuar así, tal vez una guerra se avecinaba y tener enredos amorosos en este momento es muy perjudicial para todos.

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-Se que no es un capítulo muy largo, pero no he tenido tiempo entre las clases, las tareas, etc.

-El salto de tiempo fue necesario para comenzar a crear el final de la historia el cual está cerca, espero les haya gustado el capítulo, cualquier duda o sugerencia pueden preguntar.