Somos un poema

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Marie

Después de haber estado siendo costante por 6 meses, por fin llegaron las tan esperadas vacaciones de medio año. Tengo varios planes en mente, quiero sacarles el mayor provecho y espero que todo salga a como lo planee.

La primera actividad dentro de mi lista era salir con Frank, estuvimos conversando durante varias horas sobre que podriamos hacer para despejarnos unos días. Llegamos a la conclusión de que un pequeño viaje a la playa sería buena idea, ambos amabamos las playas que estaban al norte del país.

Frank tiene un buen auto por lo que el camino de piedra no iba a ser un problema, era domingo por la noche y me encontraba en mi recamara haciendo mi maleta junto con Lucía que parecia estar mas emocionada que yo. Era tarde y no tenia ni un solo atuendo empacado para los 4 días que estariamos allá. 

- Lu, necesito que dejemos de bromear! No tengo nada listo y Frank pasará por mi mañana a primera hora. 

- ok, tranquila. Siempre puedes irte por el camino facíl y solo llevar vestidos.

- Sabes bien que eso me parece demasiado aburrido.

-Chica te doy una solución y encuentras un problema. 

- I know, pero quiero impresionar a Frank.

- Frank es el hombre mas sencillo que conozco, sé que amará cualquier cosa que te pongas.

- Tienes un punto, pero deja de intentar cambiar el tema. 

Despúes de  distintos debates sobre mis outfits nos dieron las 10:00pm, muy tarde teninedo en cuenta que me tenía que levantar temprano. Por lo que ambas hicimos nuestra rutina de skincare rapidamente para ya así irnos a dormir. 

-Deja de usar mi manta!! Por algo te di una propia

- La tuya calienta más!

La noche se pasó muy rápido, sentí como si no hubiera descansado nada. Por otro lado estaba contenta de que por fin haya llegado el tan esperado día. Me levante directo a la ducha, hice mi ritual de limpieza para continuar con un maquillaje sencillo pero lindo al igual que mi outfit que estaba conformado por una blusa azul marino ajustada al cuerpo con un escote en forma de V , unos shorts de mesclilla y uns converse blancas. 

Bajé a la cocina para hacerme algo ligero de desayuno, estaba segura de que a Frank no se le ocurrió la gran idea de desayunar antes por lo que sabía con certeza de que pasariamos a un diverfood. Una tostada con mermelada y un té bastaria. 

Recién termine de alistarme puede escuchar el como un auto se parqueaba, no era necesario asomarme por la verntana para saber de quien se trataba, tomé mi maleta y salí emocionada.

- Buenos días linda ¿Estas lista?   - Me sonrió de manera coqueta y no puede evitar ponerme roja, este hombre me pone mal. 

- Vamos- Respondí con la misma energía atrevida.

Primera parte.