Pretty Eyes [König]

Que mas da

-Nada de lo que diga o haga te hará cambiar de opinión ¿verdad?-

- ¿podrías si quiera dejar de repetir esa maldita frase?-

No cabía duda, otra vez estaba sucediendo lo mismo. Peleas y más peleas con tu novio, esta vez ya ni siquiera recuerdas porque inició todo, una simple palabra lo molestó y comenzó la discusión. Tomaste tu mochila y llaves, el al verte supo de inmediato que estabas comenzando a tomar rumbo a marcharte de su casa.

- Y así sin más ____ vuelve a hacer su retirada triunfal- Dice con un tono más bien burlón y con una leve sonrisa en su rostro.

No hiciste más que mirarlo decepcionada con un nudo en tu garganta. Tomaste la perilla de la puerta suspirando en aquella entrada, esperando que en algún momento el fuera a tomarte o impedir que te marcharas, pero eso no sucedió.

El sol estaba comenzando a ponerse y ya no pasaban tantos autobuses, así que solo decidiste caminar para despejar tu mente de un sin fin de pensamientos que te atormentaban. De vez en cuando mirabas atrás pensando que tu novio venia corriendo a ti, pero eso jamás pasó y ahora no sería la primera vez.

Te sentaste en un pequeño banquillo y miraste tu celular, tenías un mensaje de tu mejor amiga Amanda.

"Heey! ____ estamos en un bar celebrando que mi hermano regreso sano de sus misiones y tiene unas pequeñas vacaciones"

"Lo siento Amanda no estoy de humor", escribiste con tus ojos vidriosos.

"¡vaaamos, será divertido! además mañana es sábado, por favor amiga hace mucho no salimos juntas y menos a divertirnos"

Tenía razón, últimamente solo salías o ibas a casa de tu novio y habías descuidado o alejado a tus amigos por querer pasar tiempo con él, no llevaban más de dos años juntos y al principio era todo muy hermoso y de alguna u otra manera te aferrabas a esos momentos. No respondiste a su mensaje y después de un rato te mando la ubicación. Si en algo tenia razón Amanda era en que hace mucho no se divertían juntas y era importante para ella celebrar el regreso de su hermano que recientemente le estaba yendo muy bien en el ejército. Sin pensarlo más solo tomaste un taxi y te encaminaste a la dirección anteriormente señalada.

-¡¡¡____!!!- Grito corriendo hacia ti su querida y mejor amiga. -De verdad pensé que no vendrías, me pone tan feliz verte-. Te dijo sonriendo y con su dulce voz llena de cariño. Te acercaste a la mesa donde se encontraban, al principio fue un poco aterrador ver a los compañeros del hermano de Amanda, hombres realmente musculosos.

-¡____! ¿Realmente eres tú?, no te veo hace mucho ¡mira que linda estas!- dijo tomándote la mano y elevándola haciendo que des una vuelta a paso lento.

-Basta ya Chris, también me alegra saber que regresaste a salvo- dijiste con poco ánimo.

-Antes que nada déjame presentarte a los chicos, ven acompáñame- mientras Amanda te daba empujoncitos por tu espalda te giño el ojo, tu no entendiste bien su actuar al llegar a la mesa que no estaba a más de 10 pasos miraste a cada uno de los compañeros de Chris, llamándote uno en especial la atención, este estaba sentado con sus brazos apoyados en sus piernas, en una de sus manos sostenía un vaso. Lo que más te llamaba la atención es que portaba una tela en su rostro que solo dejaba ver unos ojos azulados y sentiste como comenzaba a mirarte fijamente.

-Chicos ella es ____, es una amiga nuestra desde que éramos niños, cuídenla tanto como a Amanda y no sean unos imbéciles- dijo riendo por sus últimas palabras. Uno a uno fue saludándote y mencionando sus nombres pero la verdad es que apenas otro mencionaba su nombre ya olvidabas el anterior hasta que llegó su turno.

-H..hola soy könig-. Aclaro su garganta poniendo su vaso en la mesa -U..un gusto conocerte-

Por unos segundos solo te quedaste mirándolo, su voz era armoniosa y no ronca como pensaste por un momento que sería. -Hola könig, el gusto es mío- dijiste seria, pero por dentro te sentías nerviosa de alguna manera ¿por qué? ¿es porque tenía esa mascara? ¿te causaba inseguridad, miedo? No... es solo que su mirada era demasiado penetrante y sin darte cuenta no podías dejar de verla.

-¡Genial! ahora por favor a lo que vinimos ¡mesero por favor tráiganos otra ronda!- Dijo Amanda dándote una mirada con una sonrisa como si intentara decirte que estabas haciendo lo correcto.

Los compañeros de Chris eran realmente chistosos, de verdad la estabas pasando bien junto a ellos, disfrutabas las anécdotas que contaban de sus misiones o entrenamientos, o de cómo una vez dejaron que Chris hiciera 50 lagartijas en ropa interior porque se quedó dormido y no alcanzo a vestirse para cuando llego el Teniente. Por un momento olvidaste todo lo ocurrido hace apenas horas atrás, estabas casi carcajeando con todo lo que se decía, pero basto que un vaso se cayera torpemente al suelo porque Amanda quería bailar sobre la mesa mientras Chris intentaba bajar a su hermana y los demás reían.

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-¡Qué esperas! recoge tu maldita basura, ¿primero llegas a molestarme y ahora rompes mis cosas?-

-L...lo siento, no fue mi intención yo solo quería alcanzar el control remoto cuando el vaso cayo, amor de verdad lo siento- dijiste mientras te arrodillabas a recoger los cristales-

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-¿Estas bien?- En solo un segundo la música y ruido del bar volvió casi como una explosión y esas palabras te sacaron rápidamente del recuerdo que vino a tu mente, elevando así la vista a quien te había hablado, era König... se veía bastante preocupado.

-Oh! si, lo siento iré a fumar con su permiso- dijiste con una leve sonrisa en tu rostro para no preocupar a nadie y te dirigiste a la salida trasera que daba a la zona de fumadores que era más bien una calle donde estaban los contenedores de basura del bar, buscaste tus cigarrillos en tu mochila pero no tenías el encendedor.

-Mierda acaso alguna vez harás algo bien ____ - Te dijiste a ti misma apoyando tu espalda en la pared y mirando el cielo. Sentiste como la puerta se estaba abriendo y suspiraste pues tu momento a solas había terminado pero ni siquiera quisiste ver quien era y ahora estabas sacando tu celular para pedir un taxi a casa.

-¿Las cosas son más tranquilas acá afuera no?- sentiste su voz, era könig volteaste para poder verlo pero tuviste que elevar bastante tu mirada, hasta sentiste como se estiro tu cuello hacia atrás.

-Dios ¡eres realmente alto könig!- dijiste asombrada.

-Suelen decírmelo seguido- dijo llevando su mano a su cabeza en señal de que estaba un poco avergonzado.

-Lo siento no quise decirlo de mala manera, es solo que sentado realmente no lo note y me sorprendió- le aclaraste con una sonrisa en tu rostro. Viste como se apoyó en la pared al igual que tu tomando sus dedos y jugando con ellos con su mirada pegada al suelo.

-Tienes razón, es más tranquilo aquí- quisiste volver a lo que él dijo para sacar ese silencio incomodo, mientras el solo te observo sin decir nada.

-Mierda creo que tendré que caminar, ningún taxi quiere tomar mi ruta- murmuraste molesta mientras mirabas tu celular. Esto llamo la atención de könig.

-Yo... yo puedo llevarte a casa, si quieres claro no he bebido alcohol soy el conductor designado de estos idiotas-

-No lo sé könig no quiero molestar a nadie además puedo solo caminar, no queda muy lejos- Mentira, tu casa quedaba al menos a 15 minutos en auto y unos 40 min a pie.

-¡Para mí no es ninguna molestia!- dijo agitado, se veía que realmente estaba emocionado por llevarte.

Lo pensaste un poco, lo acabas de conocer pero era compañero de Chris y no era totalmente un desconocido. -Okey acepto, pero solo si salimos por aquí-

-¿No te despedirás?- Preguntó algo confundido.

-No será necesario- estiraste tu brazo alzando tu mano en señal de que viniera contigo, pero no le dejaste tomarla apenas viste como dio el primer paso volviste a dejar tu mano en el bolsillo de tu chaqueta.

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Holaaa aquí yo, estoy emocionada por compartir con ustedes esta historia, espero les haya gustado el capítulo tanto como a mí, lo hice con mucho cariño. Cualquier duda o sugerencia déjenmela aquí. Nos vemos en el siguiente capitulo

!!!tomenagüita!!!