Hace algunos días huí de casa, las cosas no marchaban bien, y ella estaba llevando todo al caos total, un ambiente fúnebre era lo único perceptible ante mis ojos. Mamá era una drogadicta. Es duro... lo es, vivir junto con una persona que dícese llamar tu madre, pero que solo se interesa en su dosis diaria y no en cómo te va en la escuela o si por lo menos haz probado algo de comida. La última vez que vi a ¨Mamᨠestaba como casi siempre solía verla, marchita, desalineada, sentada en su mecedora fumándose un cigarro. Papá no existe, al menos no en esta historia, y está bien, porque igual no importa; él fue solo algo efímero. He hallado a Billy, es un buen tipo, un anciano con una gran y sobre todo sibilina y esotérica casa, tiene una guitarra, él dice que la música es lo único que le llena. El parece valorarme o tal vez solo le sea de interés tener a alguien que pueda ayudarlo. Nadie sabe dónde me encuentro, puede que Billy si, ahora vivo con él; pero en realidad ya no puedo ser visible ante el alma de nadie, Mamá me ha matado y yo he muerto por ella... y soy feliz.
Fin. Kiara Miketta ✌
