parte 20

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A la mañana siguiente algo me inquietaba no sabia que era me levante tome mis remedios me duche, me vesti y baje a tomar desayuno, no tenia mucho apetito mi corazón me decía que algo iba a suceder, estaba intranquilo en la mesa, pasa algo tío edward porque se ve tan pálido, no hijo no es nada estoy bien finjo una sonrisa, transcurre la mañana normal jugué un rato con los niños y con las historias que me contaba Fernanda ella era una chiquilla muy interesante una mujer que cualquiera que la escuchara se alegraría, sin duda mi querido viejo Bruno iso un buen trabajo casando a cristobal con esa dulce chica, Bruno y mi hijo eran muy buenos amigos y yo a él lo quise como mi hijo, es una lástima que se allá ido tan pronto de este mundo.
Me despido de los niños y de Fernanda y con cristobal vamos al hospital al llegar le pregunto al doctor como sigue mi nieto.

Lamento tener que darle esta noticia don Edward pero hicimos todo lo que estuvo en nuestras manos su nieto falleció en la madrugada, créame el estaba muy delicado de salud, su corazón no dio más señor.
No puede ser mi amado nieto estaba bien, usted me dijo que el estaba fuera de riesgo como es que esta muerto, me niego a creer eso doctor donde esta mi nieto, sentía que mi corazón en cualquier momento dejaría de latir, tío por favor tranquilo mis lágrimas rodaban por mi rostro no podía creer que otra vez estaba pasando esto pero en la versión de Alejandro trataba de contener a mi tío pero me era imposible ya que yo tampoco podía creer que mi hermano se allá ido de este mundo, sabía que tenía coágulos que eran difíciles de sacar y que su corazón estaba débil pero no imagine que sucedería algo así, me odie a mi mismo por mi culpa estaba Alejandro muerto, nunca debí haberle hablado de esa mujer, trataba de sostener con fuerza a mi tío, mi mundo se vino abajo primero fueron los padres de Alejandro y ahora Alejandro no quería admitir que fuera cierto trataba de mantenerme firme para poder darle el mejor apoyo a su abuelo sabiendo que mi corazón se me apretaba, ¿doctor donde está Alejandro? Quiero verlo y yo también maldito imbecil como permitiste que mi nieto muriera quiero que me lleves con el infeliz golpeo al doctor no podía creer que lo único que me mantenía en este mundo no estuviera necesitaba ver a mi niño.
Acompañenme  se muy bien que es difíciles para ustedes y entiendo perfectamente su dolor don Edward pero tratamos de hacer lo posible, el corazón de su nieto no resistio, hemos llegado señores pasen.
Al momento que el doctor sacó la sabana vimos la  cara de Alejandro, apretó mis puños de ambos lados no podía creer que mi amigo mi hermano se había ido de este mundo.
¡hijo mio! ¡Ay no hijo!, ¡ay porque! ¡porqué me dejaste! agarro su rostro mi amado Alejandro mi pequeño perdóname mi niño, perdóname por haberte obligado  casarte ¡ay mi niño no, no, no! Trato de agarrar a mi tío pero fue inútil arrancarlo de al lado de Alejandro, mi bello niño, tío por favor sueltelo, que hice cristobal caigo de rodillas que haré sin mi alejandro todo esto es mi culpa como viviré de ahora en adelante.
Me duele mucho mi corazón, tío por favor abrazo a mi tío se que es inútil decir cualquier cosa, me encargo de todo lo que había que hacer a mi tío lo tuvieron que cedar por su corazón, estoy leyendo los papeles de defunción y no puedo creer aún, que mi hermano esté muerto, una vez que está todo listo me dicen que mañana puedo retirar el cuerpo.

¡MI INFIERNO! TRAS DE TI ¡TU RECUERDO SIGUE EN MI! Donde viven las historias. Descúbrelo ahora