Morir por tristeza es tan real como suena, todo tu cuerpo deja de funcionar al momento de caer en una depresión y aparentar estar bien para no dañar a nadie, se muy bien que no es un juego entrar en una gran tristeza, yo perdí a mi mujer por esa razón.
----------------------------------------------
Han pasado 10 meses desde que escuche su voz, mire sus ojos, sentí su piel junto a la mía, 10 meses en que la hice mía por ultima vez.
Si me hubieran dicho que esa mañana la perdería para siempre, sin duda alguna no la hubiera dejado que se separara de mí, pero eso no cambiaria nada, su corazón ya no pudo soportar tanta tristeza.
Agradezco que su muerte no haya sido dolorosa, al contrario fue tranquila ya que murio mientras dormia abrazando la foto de Esteban, la muerte de Esteban fue muy dolorosa para ella, perder a la persona con quien creció no es fácil de asimilar y mucho menos cuando se trata de un hermano.
Perder a Sara fue y sera el dolor más grande que he sentido no poder escucharla reír me mata por completo, tengo videos de ella pero nada se compra con escucharla en persona, su voz tan frágil y dulce a la vez provocaba que mi piel se tornara roja al oírla pronunciar mi nombre entre sus pequeños labios.
Todas las mañanas salíamos a tomar un poco de café en nuestro balcón, mientras sonreíamos por cualquier cosa y podíamos hablar por horas sin sentirnos aburridos.... Ahora solo preparo dos tazas de café y coloco la suya en su lugar esperando escucharla entrar y sentarse a mi lado, pero me mata saber que ella ya nunca entrara por esa puerta. No quiero rendirme, pero ya no se que soy ahora sin ella a mi lado.... ¿Y si ya me rendir?
No puedo pensar en eso, aun no quiero irme de este mundo tengo muchas cosas que realizar para poder estar junto a mi amada Sara. Tengo que comprar aquella cabaña en lo alto de esa hermosa montaña, montaña en donde nos conocimos por primera vez, a ella le encantaba todo lo relacionado con actividades extremas cosa que a mi no me gustaba del todo, pero ella era tan valiente que miles de personas juntas.
-Te extraño demasiado mi bella mujer-
Pronuncie mientras acariciaba su fotografía, aquella fotografía que le había tomado mientras caminábamos por la playa en el atardecer. En ella cayo una de mis lagrimas la cual tuve que limpiar rápido al escuchar como la puerta de mi habitación se abría.
Mis ojos lo vieron entrar mientras arrastraba su pequeña manta azul y con sus pequeñas manos abrazaba a su oso de peluche, Cleo. Mis sentidos protectores se hicieron notar al ver como de sus pequeños ojos salían unas pequeñas lagrimas, sabia lo que se aproximaba.
-¿Porqué mamá ya no viene? - Sus lagrimas se convirtieron en un pequeño llanto.- ¿porqué me nos abandono? ¿Y porqué estas llorando?
Sin contestarle camine a el para cargarlo para llevarlo a la cama, para acostarnos y cobijarnos con una pequeña manta que seguía teniendo su aroma. Quería decirle algo pero al momento de querer hacerlo mi labio inferior temblaba.
ESTÁS LEYENDO
Pequeños relatos. - Harry Styles
RomanceLa mente de una persona puede crear miles de realidades, solo es cuestión de decidir en cual vivir.