ཋྀ | Epílogo.

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KyungSoo aspiró el agradable aroma de ChanYeol, y supo con certeza que habían sido destinados cuando desde pequeño siempre le habían gustado los días de lluvia, y poder sentir en el ambiente ese característico olor a tierra mojada

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KyungSoo aspiró el agradable aroma de ChanYeol, y supo con certeza que habían sido destinados cuando desde pequeño siempre le habían gustado los días de lluvia, y poder sentir en el ambiente ese característico olor a tierra mojada.

Miró con ojos enamorados al más alto, sonriendo sin control aún estando escondido en su pecho.

― No sabes cuánto te amo...

ChanYeol manteniendo los ojos cerrados, esbozó una sonrisa de par en par, haciendo notar sin vergüenza alguna lo feliz que le ponía escuchar aquellas palabras, y lo acercó más su pecho. La calidez que ambos emanaban resultaba en una nube de completa comodidad.

― Puedo darme una idea, bonito. ― Besó su coronilla, y comenzó a dar leves caricias a su ancha espalda, mimándolo con paciencia.

Eran en esos momentos de completa plenitud que los recuerdos del comienzo de su amor florecían, y KyungSoo aún sentía como si fuera ayer que lo había conocido; en esas épocas de secundaria dónde era un chico tan rebelde al igual que un animal salvaje, sin ataduras y pensando que podría comerse el mundo si así lo quisiera, pero con heridas invisibles que lo corrompían por las noches, sin pensar que se encontraría con una persona que lo bajaría a tierra, y le otorgaría un verdadero significado a su vida.

Y ChanYeol pudo notarlo, sus ojos ennegrecidos pedían ayuda, y la rojez debajo de sus ojos no parecía ser producto de algún maquillaje. Lo veía sufrir tanto y además en silencio, que supo al instante que cruzarse en su camino no había sido al azar, sino que había sido enviado a aquel mundo con un objetivo en especial; lograr que él pudiera sanar, y poder amar como siempre quiso hacer.

Al principio lo sintió inalcanzable, tan lejano que aunque saltara nunca estaría a la altura de su grandeza, y eso fue lo que asustó a ChanYeol en un comienzo, el no poder lograr lo que su corazón pedía a gritos, la necesidad de que al despertar, él estuviera a su lado.

Su mundo parecía descolocarse con sólo tenerlo enfrente, y actuaba tal cual una gelatina al saber que tenía su completa atención, por más que fuera impulsado por un rencor del que pensó que no habría vuelta atrás.

Pero realmente quería estar a su lado, de una manera genuina claro, y hacerle saber que él no le haría daño como muchos le habían causado. Sin embargo, sus planes se vieron frustrados al ver que el azabache estaba tan a la defensiva, que incluso le impedía acercársele como normalmente haría, y provocar que se tuviera que tragar su orgullo con tal de perseguirlo para obtener su atención.

Y lo volvería a ser las veces que fueran necesarias, si el final resultaba en ambos acostados en una cálida cama, abrazados y manteniendo un amor inquebrantable que nunca se desgastaba.

ChanYeol repartió varios besos por toda la extensión de la piel descubierta de KyungSoo, provocándole escalofríos por el roce de sus labios.

― E-Espera Chan, estoy enviando un mensaje.

Insolite - 𝑝𝑐𝑦. 𝑑𝑘𝑠 𝅄Donde viven las historias. Descúbrelo ahora