X┇What she experienced that day

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•Maraton: 2/3

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"«Entonces, ¿cómo debemos cuidar de nuestros niños, si siempre habrá algún enfermo depravado que atente contra la castidad pura de nuestras criaturas? ¿De qué forma debemos cuidarlos, si todo, hasta lo más pequeño, y lo que nuestros ojos no nos permiten ver, ocurre bajo nuestras narices, muchas veces sin que lo sepamos jamás? Simple: encerrar a nuestros hijos en burbujas gigantes, donde no tengan contacto con el mal. Esa sería la única forma de evitar que nuestros hijos pasaran por una situación desagradable con alguna persona en algún momento dado de su vida, pero claramente no es lo correcto.

Y he aquí nuevamente la incógnita, ¿cómo debemos cuidarlos? La respuesta es aún más sencilla: hay que enseñar a nuestros hijos a jamás promover, replicar o actuar de aquella forma indebida, para evitar que se formen monstruos como nuestro antagonista de la semana: Malcolm Malick, el abusador más despiadado de Canadá; se le adjudican más de 43 casos de abuso sexual, en donde se incluyen: la pedofilia, zoofilia, diversos casos de intento de necrofilia, y violaciones intensionadas y perpetradas a mujeres por debajo de los 46 años, donde 24 de los 43 casos fueron hacia niñas menores de 16 años.

Si la sociedad se preocupara por sus hijos, se les enseñara a no violar, matar, agravar la integridad personal y privada de una persona; a no a ser parte del movimiento errático y desenfrenado de los enfermos que fomentan este tipo de actos, con los que convivimos socialmente, agresores salvajes como Malick no existirian.

Lamentablemente, nos queda educar y resguardar a nuestros hijos de otros tantos monstruos que aún están libres, y cometen mismas y más vomitivas agresiones como Malick.

Las calles de Canadá ya no son seguras para nuestros hijos.»

Esa nota periodística fue la que Eliza Barry leyó el 15 de mayo, en el periódico local de Avonlea, «El ventanal» -que no está de más decir que ese nombre se lo dio el fundador, el señor C.K Gilliard, para referirse a que su empresa periodística sería clara, concisa y real, a diferencia de los otros periódicos que malversaban y deformaban las noticias-. Esa nota de la semana hablaba sobre la reciente captura del abusador sueco (nacionalizado Canadiense) Malcolm Malick, y de como la seguridad, no solo en Canadá, sino también a nivel mundial, había sido sumamente afectada por depredadores, con una taza de más del 6,7% de personas en los último tres meses, en su mayoría hombres pasando los 25 años, que habían agravado de alguna forma (sexual, violenta o psicológica) a una persona, principalmente del sexo femenino. Esta, y las siguientes notas, fueron escritas y redactadas por el periodista, conocido por su seudónimo: Killian Cross.

En la siguiente página de El Ventanal, el título era: LAS 43 VÍCTIMAS DE MALICK; Eliza Barry se saltó esa página. La siguiente: INFANCIA Y VIDA DE DELINCUENCIA DE MALCOLM MALICK. Eliza también se saltó esa página. Y la última que llevaba el nombre de Malick decía: ¿DE QUÉ FORMA MALCOLM J. MALICK ABUSABA DE SUS VÍCTIMAS?

Eliza cerró el periódico con una punzada en su pecho, y mandó a una empleada a que lo incinerara, o lo prendiera fuego, o lo tirara. Le dolió en el alma ver qué muchas de las víctimas eran niñas, y pensó severamente en sus tres pequeñas de ocho años, seis años y cinco meses, y el dolor de cada una de las niñas y mujeres abusadas por un depravado como Malick...

Apenas cinco días después de que Eliza hubiera leído la noticia de Malcolm J. Malick, su hija, la mayor, __________ de ocho años, contó una desgarradora noticia, luego de ser encontrada maniatada y amordazada en su habitación. Mientras la niña le contaba a su madre lo ocurrido de la noche anterior, Eliza no pudo evitar recordar la noticia del vulgar Malick, y relacionarlo dolorosamente con el propio abuso y violación de su más sagrado y puro ángel.

𝑴𝒚 𝑩𝒆𝒂𝒖𝒕𝒊𝒇𝒖𝒍 𝑳𝒂𝒅𝒚 | 𝐉𝐄𝐑𝐑𝐘 𝐁𝐀𝐘𝐍𝐀𝐑𝐃Donde viven las historias. Descúbrelo ahora