Hace tiempo, cuando me volví consciente de mis acciones me pregunté "¿Cuál es el motivo detrás de que la vida y el dolor vayan de la mano? ¿Que clase de injusto balance universal es este que atá a toda la existencia conocida y por conocer bajo el mi...
Después de una dura travesía y descubrir el significado de las últimas palabras entendibles del gobernante del pueblo Digimon, Vamdemon; el joven humano llamado Data junto a su "madre" Piyomon y la bibliotecaria Tailmon, debieron desenterrar un recuerdo del pasado. Presentándole al joven la estatua de una demonio encadenada que parecía salvaguardar una antigua arma cuyo nombre no se había nombrado hasta el día de hoy, como si su existencia fuera un secreto que trataban de olvidar, como si el nombre de esta arma significará el despertar de una calamidad, un arma conocida como:
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Data: ¿"Yggdrasword"?
Consulta el joven humano al intentar comprender el valor y secretismo que tienen con la espada oxidada que se encontraba protegida por las cadenas de aquella estatua de forma demoniaca, pero no lograba comprender el porqué de tanto misticismo.
Tailmon: Si, así era como le llamaba su dueño, un Digimon bastante…digamos que era "peculiar"
Piyomon: Bueno, fue él quien nos trajo a "Lady" en primer lugar, quién después se volvería su compañera de viaje, eso ya es bastante peculiar por donde lo veas
Data: ¿Me estás diciendo que está demonio era una compañera de viaje de otro Digimon? «Entonces ella salió de este pueblo».
En ese momento, un leve recuerdo de más temprano vino a su mente, cuando los Baby Digimon le contaban sobre las figuras de aquel libro de origen desconocido, y que parecía responder únicamente al intento de lectura de los Digimon más pequeños que se encontraba cuidando, pero con ello recordó el Digicode que visualizo, y la razón por la que se encontraban allí en primer lugar.
Data: Después me lo aclaran bien, primero necesitamos esa espada para ayudar al señor Vamdemon y así terminar con todo esto de una vez por todas.
Impetuoso por ayudar a sus seres queridos lo más rápido posible, el joven se acercó a la figura rocosa, estirando su mano para poder sacar la oxidada arma de su letargo, pero al momento en que sus acompañantes se percataron de su accionar, ya era muy tarde.
Tailmon: ¡No!
Piyomon: ¡Detente!
Data: ¿...?
Al instante en que entro en contacto con la espada, pudo presenciar como todo a su alrededor empezaba a ralentizarse, hasta quedar completamente congelado en el tiempo.
Data: ¡Tailmon! ¡Piyomon!
Asustado al ver el estado de sus seres queridos, el humano trata de alejarse para darles auxilio, pero su cuerpo se encuentra inmóvil, incapaz de moverse por debajo de su cuello.
Data: ¡¿Qué está pasando?! ¡¿Pero qué es esto?!
Réplica en furia esperando una respuesta por la tan inesperada situación, y para su sorpresa, la obtiene.