Weakness | • Daryl Dixon +18

∞ 𝟘𝟝

[𝕁𝕒𝕕𝕖 𝕄𝕚𝕝𝕝𝕖𝕣]

-Te extrañaba pequeña - dijo mi hermana mientras me abrazaba  - Enserio que sí 

-Lo sé, y yo a ti, pero estos días que haz estado, me haz asfixiado con tanto amor - respondí riendo - Me vengo recién despertando Sophia, enserio - dije apartándola de mí para poder moverme de la puerta de mi habitación, que fue donde me atajó. 

-Extrañaba verla juntas - habló mi madre

-¿Cuánto tiempo estarás aquí? - le hablé a Sophia.

-Sorpresa cariño - contestó mi hermana riendo - Ven vamos a tomar desayuno, enserio muero de hambre y por volver a comer las delicias de Annie - hablaba mientras tomaba mi mano y me guiaba hacia el comedor. 

-Todos estos días haz comido de lo que prepara Annie, deja de decir eso cada vez que vamos a comer - respondí riendo.

La noche que llegué de la cena en la universidad, ella había llegado y lo había olvidado por completo. Todo lo que pasó la noche anterior, y todo ese día, me había echo obviar por completo que llegaba mi hermana. 

Con Sophia nos llevamos por cinco años. Nunca fue un problema la edad, ni siquiera cuando ella fue creciendo. Creo que no cometí tantos errores porque ella ha sido siempre mi cable a tierra, realmente inseparables. 

Cuando tenía quince años, quise quitarme la vida y fue ella quien me salvó, nunca se lo dije a nadie, guardo el maldito secreto e intentaba a diario ayudarme a salir del abismo en el que estaba cayendo, jamás me dejó. A veces tener tanto dinero, no te quita los problemas, al contrario. De todo lo que hay en mi vida, ella es lo único bueno, y quizás por eso, es que no quiero que se case, aún no pierdo la esperanza en que vuelva a casa y hacer las mil y un locuras que hacíamos cuando éramos pequeñas. 

-¿Y Andrew? - preguntó alzando sus cejas rápidamente 

-Jmm - bufé bebiendo de mi café - ''Me pidió un tiempo'' 

-¿¡Tiene a otra!? - preguntó exaltada

-No que yo sepa - respondí indiferente encogiéndome de hombros 

-¿Hiciste algo, Jade?

-Solo salí, terminé en una fiesta y le enviaron una foto mía abrazada a un hombre. 

-Tom, ¿no?

-¿Lo recuerdas? - pregunté abriendo mis ojos en sinónimo de sorpresa.

-Mamá me contó el escándalo de la otra noche, y recuerda que soy abogada, tengo muy buena memoria, un día llegaste borracha y me hablaste por horas de Tom y de como Andrew lo odiaba. 

-Carajo - respondí entre risas - Pero sí, le enviaron una foto mía con él abrazados, y bueno, se volvió loco - dije en un susurro acercándome a ella. 

-Lo dices porque no eres celosa, Jade - mi hermana rodó sus ojos - Para una persona con inseguridad, ver algo así, es frustrante. 

-¿Para qué sentir celos, Sophia?, quien te quiera engañar, lo hará como sea y donde sea - volví a encogerme de hombros. 

-¿A qué hora llega tu prometido? - habló mi padre que venía entrando al salón 

- Seis o siete de la tarde - respondió rápidamente - Enserio estoy emocionada porque lo conozcan. 

-Y nosotros igual - respondió mi madre que también venía entrando.

-¿Sigues con esa idea loca en tu cabeza, Jade? - preguntó mi hermana.