𝐖𝐄𝐈𝐂𝐇𝐄𝐍 ⩴ 𝐡𝐚𝐨𝐛𝐢𝐧

𝐭𝐡𝐞 𝐦𝐨𝐦𝐞𝐧𝐭

◡◠◡◠◡◠◡◠◡◠◡☻ 𝐬𝐮𝐧𝐠 𝐡𝐚𝐧𝐛𝐢𝐧 ☻◡◠◡◠◡◠◡◠◡◠◡

Sentí un aroma extraño y peculiar junto a un dolor a un lado de mi cabeza que me hizo abrir los ojos lentamente. Estaba un poco mareado pero por lo poco que podía distinguir, sabía que estaba en un hospital junto a Jiwoong sacudiendo una bola de algodón sobre mi nariz.

¿Qué mierda hacía en este lugar y por qué estaba él aquí?

Lo último que recordaba era que estaba durmiendo sobre el sofá, luego escuché a Hao llamándome a gritos, correr hasta la habitación, verlo retorcerse de dolor y que me dijera que...oh no, mierda. Weichen estaba a punto de nacer y yo no sabía donde estaba Hao.

─ Hanbin... ─llamó Jiwoong al notar que estaba despierto.─ ¿Estás bien?

─ ¿Qué hago aquí? ¿Qué haces tú aquí? ¿Dónde está Hao? ─su mirada se veían preocupada, yo no entendía nada. Sabía que sonaba desesperado pero honestamente estaba asustado por Hao.

─ Te desmayaste y le pedí a una enfermera que me diera alcohol para despertarte. ─eres un grande Sung Hanbin, tu esposo pasaba el momento más importante de su vida y tú bien dormido, merecía otro sartenazo.

─ ¿Dónde está Hao? ─dejé mi autoregaño de lado para enfocarme en lo importante: necesitaba encontrar a Hao y estar en el parto junto a él.

─ Matt y Taerae lo trajeron con nosotros y ahora se lo llevaron a trabajo de parto. ─me sentía como un inútil, estuve tan al pendiente todo este tiempo para que ahora ocurriera esto.

─ De seguro debe odiarme ahora. ─ante mis palabras él negó y comenzó a reír, dejándome más confundido.

─ No pienses eso, vi como tomaba tu mano y te sonreía mientras andabas en el otro mundo. ─sentí mis mejillas calentarse al pensar en como me miraba mientras aún seguía sin reaccionar. Estaba seguro que en cuando me vea me diría mi vida entera.

─ ¿Tenía muchos dolores? ─sus palabras me hicieron sentir un poco mejor pero aún seguía preocupado por Hao; antes de caer lo vi muy adolorido.

─ Maldecía cada diez minutos dentro del auto, pero aún así te daba amor. ─reí un poco al imaginarlo, aunque creí que mi risa era debido a mi nerviosismo, sumándole los pequeños temblores en mi cuerpo.

─ Debo encontrarlo y estar con él.

─ Ahora está en el área de tocología, en la sala de parto. ─dijo y yo me levanté de inmediato, caminando hacia la escalera con la esperanza de llegar a tiempo.

─ Quiero estar presente en el parto de mi hijo y apoyar a Hao.

─ Entonces debes correr.

Y con una sonrisa de su parte, empecé a subir las escaleras hasta llegar al área de tocología, en donde ya había estado hace unos meses debido a las consultas y ecografías de Hao.

Vi a muchas personas esperando afuera de distintas salas y algunas personas embarazadas con contracciones gritando en medio de los pasillos, hasta que en unos asientos vi como Matthew y Taerae hablaban ansiosos.

Sus rostros se iluminaron apenas me vieron, como si se trata del mismísimo Jesús. Tan pronto como me acerqué hacia ellos, Taerae me empujó hacia una de las salas cerradas, sin siquiera dejarme hablar.

─ Sé que tienes mucho por decirnos y preguntar, pero ahora debes entrar si quieres acompañar a Hao. ─soltó abriendo una de las puertas para dejarme ahí frente a unas enfermeras.