𝐒𝐖𝐄𝐄𝐓 𝐇𝐎𝐌𝐄 ⁝ 𝘌𝘶𝘯-𝘩𝘺𝘦𝘰𝘬 x 𝗠𝗮𝗹𝗲 𝗿𝗲𝗮𝗱𝗲𝗿

Ⅴ

CAPÍTULO CINCO

Internal struggle

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Ahora todo se había convertido en una especie de lucha interna. Estaba intentando sobrevivir a lo que sea que fuera que me estaba consumiendo por dentro. La ira y el deseo se estaban convirtiendo en algo que me obligaba a querer hacer cosas que no estaba convencido de que antes lo podría hacer.

Desde pequeño había sido alguien reservado, tanto con sus sentimientos como con sus pensamientos, sus padres eran personas amables y con suficiente dinero para vivir una vida de lujos, querían demasiado a sus hijos: Min-seok, Min-ho y Hee-sook. Pero cuando su padre murió, el mundo de esa familia se vino abajó, su madre apenas y tenía tiempo para los más pequeños y Min, quien era el mayor, tenía que trabajar.

Entonces en esa edad, creció el sentimiento y el deseo de Min-seok, de ser como los demás, y que su mamá afrontará la situación como las demás personas cuando alguien moría, deseaba que ella siguiera adelante y quien comenzará trabajar fuera ella y no él. 

Min-Seok había tenido que renunciar a sus recuerdos de la adolescencia por tener que criar a sus hermanos menores, por tener que trabajar, por estar siendo el padre que había muerto, porque su mamá no lo podía aceptar. 

Ese deseo de querer ser alguien más, era el que lo estaba matando y ahora podía darse cuenta. Su mente se había traumado tanto y por un momento había olvidado que su padre ya había muerto, su madre no podía superar la muerte de este y por eso decidió suicidarse, y con ello llevarse a sus hermanos pequeños, olvidando por un momento que su hijo existía, tomándolo a él como el padre fallecido.

Ahora lo recordaba todo, ahora podía llorar adecuadamente y poderse responder esa pregunta interna de por qué se había suicidado. 

Las lágrimas comenzaron a salir sin parar, despertándome, de esa especie de sueño que había tenido.

— ¡Min!- Levantó un poco la voz la señora al ver que me había despertado. 

— Señora...- Pude decir y comencé a llorar. 

— Min, me preocupaste mucho.- Se acercó a mi y me abrazo fuertemente mientras acariciaba mi espalda. 

— Señora.- Volví a decir mientras se me empezaban a escapar uno que otro sollozo.

— Todo esta bien ahora.- Acariciaba una y otra vez mi espalda.

— Ahora lo recuerdo.- No podía hablar bien por las lágrimas y el nudo que se había formado en mi garganta. 

— ¿Qué sucede, Min? Cuéntame.- Se separó de mi y tomó mi rostro entre sus manos, limpiando con sus dedos mis pómulos llenos de agua.