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Llevaba ya varias semanas de lagrimas, alcohol, llamadas con Samy y Carre hundiéndome en mi soledad y tristesa y de instalación en Barcelona. Cualquier persona estaría contenta de volver a su ciudad, su supuesto hogar, pero yo no. Barcelona, ya no es mi hogar, mi hogar es donde sea que esté él: Iván Buhajeruk.


Si os lo preguntais, no, no hemos vuelto a hablar antes ni después de la velada. En realidad, no le he vuelto a hablar yo, él sigue enviándome mensajes cada día. Me envía fotos de cualquier cosa que le recuerde a mí, incluso me cuenta su día y me dice que le hubiera encantado que yo lo hubiera vivido con él a su lado, ahí, en Argentina, el país que fue mi hogar al lado suyo desde hace 5 meses.


Obviamente no puedo evitar leer los mensajes que me envía, soy débil, él me hace débil.


Han pasado ya 26 días desde lo sucedido aquel jueves 29 de junio. Y sigo extrañandolo tanto como el primer día, flipante ¿no?


Extraño su holor cada vez que me levanto, me deprime ver ese hueco vacío de la cama donde deberías de estar su figura durmiendo. Me mata ver el sofá donde podríamos estar viendo películas cada noche después de Stream, amaba hacer maratón de Disney contigo, es que ¿Ver Cars y Rapunzel juntos? Definitivamente y con diferencia, mi momento favorito de la semana.


Bajé al salón, después de acabar Stream. Lo admito, adelanté mi horario solo para que me diera tiempo a ver sus directos, extrañaba ver esa sonrisa y esos ojos cada mañana, y ni hablar de su pelo, el que por desgracia oculta con gorras o gorros siempre.
Muchas veces se me ha pasado por la cabeza esconderselas.


Encendi la televisión y entre en Twitch, cuando en mi móvil salto una notificación






"Spreen está en directo"





Me metí en mi cuenta falsa y como cada día entro a ver su directo. Aún no había iniciado, estaba la pantalla de espera. Mientras escuchaba la canción que tenía de fondo el directo, me llega un mensaje








Iván 🖤

Hoy voy a anunciar en Stream un proyecto muy importante para mí


Me encantaría que estuvieras
detrás del monitor, apoyándome
como solías hacer siempre
que estaba nervioso
y te necesitaba


Pero supongo que ya no es así,
sigo con fe de que algun dia
me puedas perdonar por la
cagada que me metí


Lo siento mucho


Te quiero






Lagrimas empezaron a rodar por mi mejilla


Estuve un rato pensándolo, un rato que al parecer se hizo largo ya que el ya había empezado Stream y mi reloj dieron las 12 hora española.


Después de borrar y reescribir el mensaje unas cien veces lo envíe. A la mierda todo


Vi como cogió el móvil y al instante como una enorme sonrisa salía de sus labios










Tal vez no esté detrás de
tu monitor, pero esté donde esté siempre te estaré apoyando

Te quiero























Mentiroso; SpreenDonde viven las historias. Descúbrelo ahora