Little Prongs ||J.P||

7. Hogwarts

1 de septiembre de 1977

La cita había ido bastante bien, gracias a Merlín a Mia le había encantado. Habíamos ido de pícnic, así que traje varios libros que a ella le interesarían y prepare sus cosas favoritas para disfrutar de la tarde.

Aunque no iba a negar que estuve demasiado nervioso, porque creía que a ella no le gustaría, pero Sirius había tenido la razón. Al llegar a casa nos la pasamos jugando a las cartas con los demás mientras le echaba un ojo a Hope.

No podía creer que tuviera la suerte de tener una familia tan grande.

Ahora nos encontrábamos preparando lo último que nos quedaba, ya que hoy partiríamos a Hogwarts y estaba demasiado nervioso, a pesar de que ya le habláramos a Dumbledore de la situación, no sabía como saldría todo esto.

Tenía un poco de miedo, al igual que no estaba seguro de que Hope estuviera alejado de mí, era mi pequeña princesa y eso era algo claro, a pesar de que ya llevaba unos tres meses más o menos viviendo con nosotros. No podía estar mucho tiempo lejos de ella y a Mia le había pasado lo mismo, porque se había quedado estos últimos días con nosotros.

A mi madre le encantaba tenerla con nosotros, al igual que le encantaba a mi madre avergonzarme delante de ella, mostrándole fotos mías y tratándome a veces como un bebé. Sabía que no lo hacía con mala intención, pero no iba a negar que me divertía cuando mi madre hacía lo mismo con Sirius.

El Karma.

Como mencione anteriormente nos encontrábamos preparando todo. Mia tenía a Hope en brazos mientras yo veía que todo estuviera bien ordenado en el pequeño baúl de Hope. 

 —Eres la niña más hermosa del mundo —sonreí al escuchar a Mia hablarle al bebé, la verdad es que, por una parte, ya quería que Hope hablara, pero por otra quería que siguiera siendo un bebé siempre.

Levanté la mirada para verla con Hope en brazos, la última tenía una sonrisa mientras veía a Mia.

Sonreí viéndolas, era algo que no quería olvidar nunca, agarré rápidamente la cámara y les hice una foto, no podían culparme, eral algo que me encantaba hacer.

Sacarles fotos era uno de mis pasatiempos favoritos.

Mia me miró enarcando una ceja divertida y Hope se giró para verme con una sonrisa.

—¿Qué hace señor Potter? —ella se levantó para acercarse a mí, así que la abrace por la cintura, dándole un beso en la mejilla a cada una.

Hope soltó una pequeña risa y la tomé en brazos, así que ella escondió su rostro en mi cuello, haciendo que soltara una pequeña risa al igual que Mia.

Era la princesa de papá y eso todos lo sabíamos.

—Digamos que soy vuestro fotógrafo y os veíais demasiado lindas, así que decidí sacaros una foto para el álbum —ella sonrió dándome un beso en la mejilla.

—Pues me encanta, aunque yo también quiero sacaros muchas fotos, porque sois tan adorables —solté una pequeña risa mientras abrazaba a Hope.

—Y se te olvido que somos demasiado hermosos, es lo que tiene el encanto Potter —ella volteó los ojos divertida alejándose para cerrar el baúl de Hope y el suyo.

—Engreído —sonreí.

—Pero me amas —ella asintió—. Bueno, creo que ya está todo. ¿Estás lista para ser una madre en Hogwarts? 

—Estoy bastante nerviosa, pero tambien se que estoy lista porque Hope es nuestro pequeño tesoro —yo asentí y Sirius aparecio por la puerta con una sonrisa.

—¿Estáis listos familia? —tanto Mia como yo asentimos con una sonrisa y le entregué a Hope para poder ayudar a Sirius con los baules. 

Una vez que lo conseguimos, nos subimos al coche y papá condujo hasta la Estación, lo bueno es que Hope se había quedado dormida en brazos de Mia, lo complicado sería intentar que siguiera así una vez que ya estuviéramos en la Estación, pero temía que eso no posara.

Tampoco quería que se asustara con tanto ruido, así que tendría que pensar en algo. Aunque no se me ocurría nada.

El viaje hasta la Estación fue demasiado rápida para mi gusto, así que Mia y Sirius bajaron primero para buscar los carritos y así poder dejar nuestros baúles. Una vez que lo consiguieron, tuve que darle a Hope a Mia, para ayudar a mi padre y a Sirius.

Así que cuando lo conseguimos caminamos hacia la Estación para acceder a ella e ir al andén. Ahí nos encontramos a Remus y sus padres, al igual que a Peter y su familia. 

Estuvimos un rato con ellos conversando entre risas y lo bueno es que Hope se despertó unos minutos antes de que cruzáramos el andén, así que poco a poco fuimos adentrándonos hasta que por fin fue el turno de Mia, Hope y mía. Así que los tres con una sonrisa accedimos dejándome ver el tren que nos llevaría por fin a Hogwarts.

Hope se quedó viendo todo mientras me abrazaba débilmente, la miré con una pequeña sonrisa y los chicos se fueron a dejar todo en lo que Mia y yo nos quedábamos con mis padres.

Estaba demasiado nervioso, pero tenía que verle el lado positivo a esto, y era que tenía unos increíbles amigos y a una maravillosa novia que sabía con certeza que estarían ahí para ayudarme con lo que sea. Incluso sabia que Minnie y Poppy cuando vieran a Hope se morirían de ternura y no se despegarían de ella. 

Minnie era como nuestra segunda madre por así decirlo, siempre había estado ahí para nosotros y aunque fuera una mujer demasiado seria sabíamos que en el fondo nos quería demasiado, al igual que nosotros a ella.

—Vais a cuidaros mucho y cualquier cosa solo escribirnos, ¿vale? —asentí con una sonrisa a mi madre mientras la abrazaba, papá tenía a Hope que los dos estaban riendo, algo que me hizo sonreír demasiado.

Un rato después nos avisaron que debíamos entrar al tren, así que tomé en brazos a Hope y volví a despedirme de mis padres, al igual que el resto. Una vez listos subimos al tren y buscamos nuestro compartimento, Hope miraba todo curiosa para solo tener tres meses casi. 

Una vez que encontramos nuestro compartimento nos sentamos y yo me senté al lado de la ventana para ver a mis padres con una sonrisa y a mi madre con lágrimas en los ojos despidiéndose de nosotros.

—Diles adiós Hope — susurré agarrando con cuidado la mano de ella para moverla en forma de despedida cuidadosamente. Ella sonrió y el tren se puso en marcha.

Estaba demasiado emocionado por esta aventura, no sabía como sería tener un niño en Hogwarts, pero seguro que con ella ahí cada día sería una aventura nueva, incluso era capaz de que fuera nuestra cómplice de bromas. Debía convertirla en una bromista, al igual que su padre y sus tíos, y le daría la Capa de Invisibilidad, al igual que a mis futuros hijos, si es que Mia quería.

Esta aventura apenas comenzaba y estaba listo porque tenía la más maravillosa compañía.

NOTA DE LA AUTORA

¿Qué os pareció el capítulo?

Espero que os haya gustado.

Os amo demasiado y gracias por todo el apoyo. Ya sabéis que podéis seguirme en tiktok para ver todos los edits de mis historias. La cuenta es historias.wattpad_ también hay un Hashtag por si queréis hacer edits de la historia, yo encantada de verlos #littleprongswattpad ❤

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