Overlord: El que se quedó PRT. 2

Capitulo 1 Volumen 8

Hola, como andan, como veo que no cumplieron la meta, si, todos los dia venia revisar si cumplieron y pasara más tiempo y nada, y pues decidi actualizar, pero como no cumplieron, actualizare cada vez que me de la santa gana.

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"Es bueno verte de nuevo, Nua". Raymond dijo cuando estuvieron solos después de la quinta visita de este tipo en tantos años. Sus orejas se movieron cuando él habló, revelando su felicidad a pesar de la cara neutral que trató de mantener.

La máscara neutral rompió en una pequeña sonrisa, "No puedo fingir contigo, ¿verdad?" Ella le preguntó y miró hacia las largas y serpenteantes escaleras que subían a la torre. "¿No van a escuchar?" Ella preguntó.

Sacudió la cabeza, "Magical noise suppression".

"Bien." Nua dijo y puso una mano en su pecho. "¿Todavía... sobre mí, nosotros?" Ella preguntó.

"Soy leal a mi país". Raymond dijo y cubrió su mano con la suya, "Pero eso significa algo más para mí de lo que solía ser. No quiero verlo destruido.

Nua se miró los pies, "¿Cuántos?" Ella preguntó.

"Obtuve tres más esta semana. Eso me lleva a cien desde que regresé de mi último viaje. No muchos, pero... pero les hace una diferencia". Raymond le dijo, y ella frunció los labios.

"Eso cabe. Entonces te diré algo que aún no sabes. Dos algos, en realidad. Estás salvando a mi gente, así que intentaré salvar a algunos de los tuyos. Nua le respondió y Raymond ladeó la cabeza.

"¿Qué paso?" Preguntó, sus ojos intensos casi derritiendo su corazón incluso para sentirse fijos en ella.

"Tu Capitán de las Escrituras Negras, desapareció, ¿verdad? ¿O estoy equivocado? Ella le preguntó, y sus profundos ojos se abrieron ante la pregunta. 'Nadie debería haber sabido que...'

"Sí, tienes razón, fue enviado a alguna parte por el Pontifex Maximus". Raymond respondió cuando se acercaron a la puerta en la base de los escalones.

Está a punto de convertirse en el Rey de Demalbion. Pronto asistiré a su coronación". Nua dijo, y se quedó quieta mientras esperaba que la noticia se hundiera.

"Así que lo enviaron allí a-" Sus dientes chasquearon cuando su mandíbula se cerró de golpe.

"La reina nos dice que han sido amigos durante años. Cuando recibió la orden de matarla, se fue y la sedujo en su lugar. Ella lo está convirtiendo en Rey, has perdido a los miembros más poderosos de la Escritura Negra. Tienes a Zesshi al norte y a Demalbion y sus ambiciones territoriales al oeste".

"¿Territorio?" Raymond sintió que el hielo se apoderaba de su corazón.

"Las montañas, aleja a tu gente de esas, las vas a perder. Incluso yo no sé mucho, pero comience a alejar a esa población de allí tanto como sea posible, abra nuevas tierras de cultivo y ofrézcalas libremente a los residentes de Feron, haga algo, o tendrá una masacre en sus manos. Eso es todo lo que puedo decirte. Dijo Nua, y luego se inclinó hacia adelante y lo besó con fuerza en los labios, él se lo devolvió, levantando la mano, le acarició las orejas y la sintió temblar con su toque.

Pero así como ella era la agresora, también lo cortó, retrocediendo antes de que las cosas pudieran ir más lejos. "Me tengo que ir. Ten cuidado, no quiero perderte." Nua dijo y Raymond respondió con la misma convicción-

"Lo mismo para ti. Incluso venir aquí como embajador es peligroso". Él lo señaló y ella se encogió de hombros.

"Al menos así puedo irme, antes no podía. Hasta el próximo encuentro, el cardenal Raymond Zarg Lauransan". Nua dijo y le dio unas palmaditas en la mejilla con una mano callosa antes de abrir la puerta de roble y salir a la luz del día. Él la observó hasta que subió al carruaje verde y dorado que esperaba, pero lo siguió con la mirada hasta que se perdió de vista, y solo entonces cerró la puerta, dio la vuelta y regresó por donde había venido.