Capítulo ll.

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                                    Jackson.

Salí del aula con los nervios a flor de piel, me emocionaba volver a encontrarme con Keyli y ver qué seguía igual de guapa como hace 8 años, estaba enamorada desde que había tropezado con ella en 5to de primaria pero al parecer ella no me recordaba, y no la culpo, antes de que pudiera terminar 6to grado mi madre había decidido que lo mejor para mí era que estudiara en casa, con maestros que solo me dedicarán atención a mi – todo esto porque se había casado con un millonario que me lo pagaba todo – con los años ellos se separaron y mi madre lo perdió todo, solo le dejo una librería – dónde ella la manejaba y el pagaba los sueldos - y decidió que volviera a estudiar con los otros. Para mí era lo peor pero al ver a Keyli me llene de ganas por seguir estudiando aquí.

Todo el camino a casa espere su mensaje, pero nunca llegó. Cuando llegue a casa me encontré a mi madre en la cocina sacando cuentas de los pagos que tenía que hacer y al verme me dijo lo peor:

-Jack, necesito que entres a trabajar. – Yo me quedé helado en mi lugar y ella siguió hablando – Puedes entrar donde tú quieras.

Tras decirme eso me dio tiempo para pensarlo y dije:

-Hoy pase por la librería y mire que había un puesto disponible, si quieres que trabaje, dame empleo.

Mi madre me miró y tras pensarlo, acepto.

-Empiezas está misma tarde – dijo.

A través de un susurro.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora