⇆ ◁ |Dos enamorados que no pudieron evitarse a pesar de sus desafortunadas circunstancias| ▷ ↺
Jeon Jungkook no pudo evitar a la casualidad más bonita que el destino puso en su camino. Porque era imposible ignorar a alguien como Kim Taehyung. Su enc...
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Jeon Jungkook convirtió a Han Soohee en su novia hace dos años aproximadamente. Para todos eran la pareja perfecta, pero cuando las puertas del hogar que ya compartían se cerraban, el cuento de hadas cambiaba por completo.
El amor no les unía en lo más mínimo. Apenas se habían besado y dado unos cuantos abrazos para aparentar frente a todos su magnífico compromiso con el otro. Sin embargo, sus familias estaban más que felices por su tierna unión.
A fin de cuentas, eran hijos de familias prestigiosas, y que llegaran a casarse influiría en un acuerdo mucho más grande y fructífero para las empresas que cada uno de sus progenitores poseía.
Soohee quería mucho a Jungkook, se podría decir que era la única que profesaba el sentimiento conocido como amor. Pero el chico, por más cariño que le tuviera a la fémina que conocía desde niño, sabía que jamás podría corresponderle como ella tanto quería.
¿El motivo? Era homosexual.
Desde que tenía uso de razón, las mujeres nunca le atrajeron a pesar de que para la sociedad en la que vivía eso era lo normal. Odiaba que sus ojos siempre siguieran a los hombres a su alrededor, sin embargo, llegado un determinado momento, supo que no podría combatir contra eso.
Peor aún cuando la mayoría de estos jóvenes llegaron a corresponderle con gusto, pero el primogénito de los Jeon sabía que nunca pasarían a ser algo más que sus compañeros de cama.
Momentos fugaces de intimidad que desaparecen al día siguiente cuando él huía de los hoteles en los que se reunían para tener un poco de privacidad antes de volver a su farsa cotidianidad.
No obstante, todo cambió ese día.
Después de una discusión con su novia, en la que Soohee se fue del restaurante como alma que lleva el diablo, el chico quedó hipnotizado por la voz de un atractivo joven de piel canela, rostro etéreo, voz de terciopelo y cabellos castaños que estuvo cantando exquisitas piezas de jazz durante la velada.
Cuando sus orbes se encontraron, el mundo pareció recobrar sus verdaderos colores. Los tonos monocromáticos se transformaron en un arcoíris lleno de vida desde el instante en que cruzaron algunas palabras en la barra.
Una copa, dos copas, una botella vacía, unas risas cómplices, unos sonrojos pintando sus mejillas y una tentadora invitación.
Ambos terminaron enredados en las sábanas y eso significaba problemas desde que ninguno de los dos quiso abandonar la calidez del cuerpo ajeno.
O quizá no...
De todas formas, esa noche algo distinto sucedió en los corazones de ambos jóvenes, por lo que tendrían que encontrar la forma de enfrentarlo de la mejor manera si querían un final feliz.
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No me pude resistir y aquí estamos. Espero disfruten y le den mucho amor a esta corta historia que nació gracias a lo que se pudo ver en el teaser de seven.
