I HATE THE GREEN

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INSPIRADO EN "Menos como una pesadilla" DE Mayberryberry DE AO3

Cristian no tenía planes de despertar temprano esa mañana hasta que una llamada de Spreen en su celular lo despertó, el vibrar del móvil contra su mesa de noche acompañado de un horrible todo de llamada con una canción que encontró en TikTok. Spreen junto a Carre y Oscu eran las excepciones a sus silenciamientos antes de dormir en casa chat de su teléfono.

La llamada lo hizo despertar a las dos de la mañana con un sabor pastudo en su boca pues no se había lavado los dientes antes de dormir esa noche, asqueroso si, lo que dejó el sabor de los Doritos incógnito enviados de México en su boca.

Spreen estaba preocupado, todo fue rápido; Carre y Spreen hablaban, la cosa aumento hasta que empezaron a gritarse, Spreen dijo algo que lo lastimó —no lo repitió a Cristian—, Carrera respondió con una piña y después se largo de la casa. Spreen dijo algo cómo: —Pensé que él volvería a disculparse, sabes cómo es Rodrigo, pero eso fue hace cinco horas y Amir dice que no ha regresado al apartamento. ¿No te ha llamado?

—Para nada. Ahora salgo a buscarlo —Cristian sabía que no podía quedarse quiero y pensar que Carre volvería a la mañana siguiente, no podía hacerlo porque era el tipo de persona que sobrepiensa hasta que le duela la cabeza.

Dio igual que Spreen le recordara la hora y que cualquiera que lo viera probablemente le robaría el celular, solo salió de la casa.

Cristian sentía que Carre se había alejado de él en los últimos días. Eran extraños, luego amigos, mejores amigos y después...simplemente amigos tirando a extraños. Nunca se lastimaron, pero el petizo parecía incómodo de repente estando a su lado y no era porque le gustarán los hombres, Cristián no era homofóbico, de alguna manera, parecía que todo giraba en torno a eso. Pero no quería que se fuera, quería quedarse a arreglar las cosas.

Fue su sorpresa cuando a lo lejos, a varios metros del césped del parque vio a Carre tirado boca arriba cómo si fuera una cama, se acercó de inmediato y lo observó.

—¿Sigues despierto o llamo a la ambulancia? —los ojos de Carre eran ligeramente verdes y estaban enrojecidos, estaba colocado hasta quién sabía dónde y todo en su cara lo delataba.

—Hola —fue lo que Rodrigo le dijo con los ojos entrecerrados y una voz a medio morir —. Estoy bien, no tenías que venir.

Cristian observo a Carrera, sus brazos tendidos a los costados de su cuerpo y piernas abiertas, lividas sobre el césped que seguro le picaba en las piernas desnudas por los pantalones cortos.

Su acompañante de esa noche decidió sentarse a un lado, a unos centímetros de distancia. Cristian atrajo sus propias rodillas hasta la altura de su pecho y luego se quedó en silencio hasta que volvió a tener la intención de hablar.

—¿Qué pasó con Spreen hoy? —Carrera pareció entrar a la realidad y estar lucido por unos segundos, luego se volvió a desvanecer en su torpedad.

Carre no decía nada, continuaba con la mirada fija hacia un cielo estrellado sobre sus cabezas. Por el otro lado, Cristian ni siquiera lo forzó a darle una respuesta, esperaría con paciencia hasta que su amigo quisiera hablar acerca del tema, siempre había sido así después de todo ¿no? 

Ellos dos se conocieron tiempo antes de que Rob se integrará al grupo, no había algo especifico o una forma normal de decirlo, pero se resumiría a que Cristian lo encontró en un bar gay, Carre no estaba avergonzado de su sexualidad, sin embargo, no sentía que fuera el momento para confesarlo con los demás. Desde el inicio a Cris le parecía que Carre solo quería conservarlo cómo una especie de acuerdo invisible, un acuerdo en el cual Cris no revelaría haberlo visto en ese lugar. 

𝐈 𝐇𝐀𝐓𝐄 𝐓𝐇𝐄 𝐆𝐑𝐄𝐄𝐍; Rodrigo Carrera | ONE SHOT ✓Donde viven las historias. Descúbrelo ahora