Libro 1 : Capítulo 2

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Alguien olía muy bien mientras me tocaba. Pude oler la fragancia y sentir el peso de una mano en mi hombro. Pero el miedo se apoderó de mi de todas maneras.

La explicación de terror que me hacía volver en mi de golpe llegó en el momento justo. Sabía lo que era pero
aun así el pánico me dominaba. Debería reconocerlo
era un sentimiento que ya llevaba años acompañándome.

— Becky levántate.

Esa voz. ¿Quien era? Abrí los ojos y delante de mi tenía el azul intenso de los ojos de Freen Sarocha a menos de quince centímetros. Empuje hacia atrás el asiento para poner más distancia entre esa preciosa cara y yo.
Ahora lo recordaba todo ella compró mi foto la otra noche y me llevo a casa.

— ¡Mierda!, lo siento. ¿Me quede dormida? — Busque
a tientas la manilla de la puerta pero no conocía su choche. Me moví a siegas para salir de hay.

La mano de Freen salió dispara y cubrió la mía ,
agarrándola con firmeza.

— Tranquila estás a salvo no pasa nada. Solo te
quedaste dormida. Solo eso.

— Okey ..., lo siento. — Respire profundamente, mire
por la ventana y luego a ella otra vez, que seguía
observando cada uno de mis movimientos.

— ¿Por que sigues pidiendo perdón?

— No se. — Susurre si lo sabia pero no podía pensarme en eso en este momento.

— ¿Estás bien? — Sonrió despacio mientras ladeaba la
cabeza. Estoy segura de que le gusta ponerme nerviosa. Yo no tenía claro si a mi me pasaba lo mismo.

Necesitaba acabar con esta situación inmediatamente,
antes de decir que si a otras cosas. Algo tipo: Quítate la
ropa y túmbate en el gran asiento trasero de mi coche,
Becky. Esa mujer tenía un don a la hora de controlarme que realmente me ponía nerviosa.

— Gracias por traerme. Y por el agua, y por lo dem....

— Cuídate Becky Armstrong. — Apretó un botón y se
levantaron los seguros —. ¿Tienes la llave a mano?
esperare hasta que estés dentro ¿Que piso es?.

Saqué la llave de el bolso y metí mi teléfono , que estaba en mi regazo.

—Vivo en el estudio de el quinto piso , en la quinta
planta.

— ¿Compartes piso?

— Eh si pero seguramente no se encuentra mi compañera. —De nuevo me preguntaba por que se me
iba la lengua y le daba información personal a prácticamente una extraña.

— Esperaré a ver la luz encendida entonces. — La cara
de Freen era muy difícil de descifrar. No tenía ni idea de lo que estaba pensando.

Abrí la puerta y salí.

— Buenas noches, Freen Sarocha . — Deje el coche junto a la acera y me dirijo a la entrada de el edificio al
tiempo que sentía como clavaba los ojos en mi mientras caminaba. Cuando metí la llave en la puerta mire por encima de el hombro el coche las ventanas eran tan oscuras que no podía ver el interior, pero ella estaba hay , esperando a que entrara en mi edificio para poder irse.

Abrí la puerta de el edificio, y después de que tenía cinco pasos por delante me quite los tacones y me quede descalza. Nada más de entrar en mi apartamento encendí las luces y cerré la puerta. Me derrumbé literalmente contra la puerta de madera en busca de apoyo. Mis tacones hicieron ruido al caer a el suelo y solté un enorme suspiro.

¿Que demonios acaba de pasar?

Me llevo un minuto apartarme de la maldita puerta y volver a la ventana.

Desnúdame el Alma (FreenBecky  G!P )Donde viven las historias. Descúbrelo ahora