01 : ¿Famoso?

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La odiosa melodía de su alarma le avisaba que ya era hora de comenzar el día, con pereza se levantó de su cama para ir directo al baño.

Cuando salió de este ya bañado y con los dientes bien cepillados, se apresuró a vestirse, luego tomo su teléfono e hizo una mueca al ver la hora, 6:40 am.

—Mmm, parece que hoy tampoco podré comer aquí.

Se terminó de arreglar, tomó su mochila y salió de su apartamento, se dirigió al ascensor, pero para su mala suerte, este estaba averiado, otra vez.

Parece que hoy no era su día.

Luego de bajar las escaleras y salir del edificio, caminó hasta la estación y de camino aprovecho y compro algo de comer.

Espero a que llegara el autobús mientras comía su "desayuno", luego de unos minutos por fin vino hoy.

Afortunadamente al ser relativamente temprano, habían algunos asientos vacíos, por lo que se sentó en uno, se colocó sus audífonos y se puso a escuchar música en lo que llegaba a su destino.

Luego de que el autobús se fuese por la ruta equivocada y lo dejara cuatro cuadras de su lugar de trabajo, tuvo que caminar con algo de prisa.

—¿Otra vez el autobús te deja botado? —Preguntó con algo de risa su mejor amiga y jefa, Nayeon, al verlo llegar.

—Al parecer hoy no es mi día —dijo mientras la ayudaba a abrir el local.

Acomodó las mesas mientras Nayeon acomodaba los mini postres y las cafeteras.

—¿Por qué Jimin tiene cara de que lo arrolló un carro? -—preguntó esta vez Eunjin quien recién llegaba.

—Mejor hablemos de que vuelves a llegar tarde —habló Nayeon con los brazos cruzados, mirando a la beta.

—Uhh, es una larga historia.

—La misma larga historia de siempre —murmuró Jimin.

—Que no se vuelva a repetir por favor, nos retrasamos más en abrir si solo estamos dos personas —pidió Nayeon.

—Está bien, no volverá a pasar, palabra de Ahn Eunjin —dijo mientras levantaba una mano y la otra se la ponía en el pecho.

Ambos omegas rodaron los ojos, ahora con la llegada de Eunjin pudieron terminar de acomodar el café y poder abrir.

...

Jimin no se quejaba de su trabajo, tenía un horario que, aunque a veces le hiciera maldecir su existencia porque debía sacrificar sus horas de sueño, era más soportable que el de los trabajos que había tenido anteriormente, además de que su paga no era mala y podía darse el lujo de comprarse sus buenas hamburguesas en ese puesto que tanto le gusta.

Aunque de lo que sí se quejaba era del mal genio que tenían algunos clientes, puesto a qué algunos se creían que tenían el derecho de tratarlo como quisieran, en especial los alfas, en esos momentos Jimin tenía que morderse con fuerza la lengua.

Pero de resto, todo era soportable, o la mayoría del tiempo.

—Yo debería estar en alguna playa de Dubai, relajándome, pero no, estoy aquí, limpiando el desastre que dejó un maldito alfa —se quejó en voz baja el omega mientras limpiaba una de las mesas en las que cuales un alfa había botado su café, y no fue precisamente un accidente.

Cuando terminó volvió hasta la caja, la campanita sonó haciendo saber que un cliente nuevo había llegado.

—Buenos días, ¿Que va a pedir? —preguntó amablemente al hombre, aparentemente un alfa.

—Buenos días, quisiera un café helado, por favor.

—Enseguida —tomó uno de los vasos y un marcador—. ¿Cuál es su nombre?

—Min Yoongi.

—Yoongi —susurró mientras escribía el nombre en vaso y un corazón—. Ya le traigo su pedido.

Luego de unos minutos, el café ya estuvo listo, el hombre pago y antes de irse le dijo a Jimin

—Bonita caligrafía —le sonrió y salió del café.

Jimin se quedó estático, sin saber que decir, los clientes no hablaban con él si no fuese para pedir su orden, jamás le había pasado algo como eso.

—Jimin, ¿cómo dijo que se llamaba el cliente que acaba de salir? —Eunjin apareció a su lado.

—Yoongi, Min Yoongi, ¿Por qué?

—Es el maldito Min Yoongi, el dueño de una cadena de restaurantes muy famosos, ¿Acaso nunca lo habías visto? —el omega negó, jamás lo había visto.

¿Un famoso acaba de decirle que tenía bonita letra?

—¿Ustedes que tanto hablan? Vuelvan a trabajar, por favor —pidió Nayeon desde la cocina.

Ambos asintieron volviendo a sus labores, aunque en la cabeza de Jimin seguía la imagen de ese hermoso chico.




Ambos asintieron volviendo a sus labores, aunque en la cabeza de Jimin seguía la imagen de ese hermoso chico

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hola, soy yo otra vez jeje

se supone que dije que me tomaría un descanso, pero escribir es lo único que me entretiene so... aquí me tienen :)

esto ha estado en mis borradores desde inicios de año, hasta hace poquito fue que lo empecé a retomar porque me gustó la idea, espero que a ustedes también ♡

los tqm, day

ice coffeeDonde viven las historias. Descúbrelo ahora