oh, hyung ; kookgi

única parte

yoongi sabía que jungkook llevaba un par de días estresado. el estreno de su nueva canción, la coreografía, las preparaciones para el álbum y la expectativa del recibimiento del público siempre era un peso pesado que cargar como artista, yoongi sabía lo que eso se sentía y por eso también sabía cómo identificar cuando uno de sus miembros se encontraba estresado por esas razones.

en los últimos días, yoongi apenas había visto a jungkook en casa.

yoongi se despertaba por la mañana con el lado de la cama de jungkook frío y un mensaje en el teléfono ("amor, estoy yendo a ensayar la coreo, te amo mucho. ¿nos vemos en la noche?") y llegaba a la noche con un departamento vacío excepto por sus perritos y otro mensaje en el celular (bebé en serio lo siento mucho, estoy regrabando el estribillo de una canción, te amo mucho, perdóname"). y yoongi realmente no podía molestarse porque sabía lo que era estar en esa posición; hace unos meses los papeles se habían invertido y había sido yoongi quien cancelaba los planes, así que solo le respondía (no te preocupes, kookie, no te quedes hasta muy tarde, ¿si? ten cuidado al regresar a casa, yo también te amo mucho).

ambos eran artistas experimentados en la industria, sabían cómo se movían las cosas, no había otra opción. por más que yoongi hiciera un puchero con sus labios y se quedará hecho bolita, triste porque extrañaba a su novio, todo el día, sabía que no podía interrumpir porque era simplemente como debía de ser.

incluso si iba a verlo a la empresa, yoongi solo podía verlo a lo lejos y muy ocasionalmente podían escaparse a los baños para un beso rápido antes de que jungkook debiera regresar al estudio a grabar algo o a las salas de ensayos para repasar su coreografía.

¿qué podía hacer yoongi? era lo que era. y él, aunque triste, aceptaba y se sentía orgulloso de este nuevo paso que jungkook estaba por tomar.

sin embargo, cuando las cosas tomaban un borde que no era bueno para la salud de jungkook... entonces yoongi sabía que debía intervenir.

jungkook comenzaba a lucir estresado por la situación, demasiado metido en su cabeza que no hallaría soluciones para los típicos problemas que se generaban cuando producías un álbum, con la mente tan llena de preguntas que realmente no encontraría la respuesta. yoongi sabía que se sentía y por eso también sabía que hacer para darle un respiro.

ese día fue a la empresa y se paseó por las salas de ensayos y estudios de grabación hasta que encontró a jungkook. estaba en su estudio, el de yoongi, y eso hizo que no pudiera evitar sonreír.

jungkook estaba tan concentrado en la pantalla que no se dio cuenta de la llegada de su novio hasta que este lo abrazó por la espalda. jungkook saltó, asustado, pero cuando vio de quien se trataba se relajó.

— hey, bonito — jungkook se giró con la silla y se puso los audífonos en el cuello.

— hola, perdido — lo saludó yoongi mientras se acomodaba parado entre las piernas de jungkook. lo abrazó sueltamente por los hombros y jungkook lo sostuvo por la cintura.

— ¿qué haces aquí, amor? — preguntó jungkook acariciando a yoongi por encima de su ropa.

— vine a ver mi novio. hace mucho que no lo veo, casi casi me olvido de quién es.

jungkook hizo una mueca y bajó la mirada. era una broma, pero él se sentía culpable de igual forma porque también sabía que había descuidado a yoongi.

— lo siento mucho, yoonie, te juro que-

pero yoongi negó con la cabeza con una sonrisa suave, jugó un poco con el cabello de jungkook y se pegó más a él:— yo entiendo como es, ambos sabemos como es todo de ajetreado en los últimos días, pero me preocupa que te estés estresando demasiado.