El Camino Sigue [Furry Yaoi] [Terminada].

Ya entendí.

[Henrick]
Me siento mucho mejor desde que todo se arregló con Kaleb, puedo ver a Damian mucho más tranquilo, incluso sus padres me agradecieron cuidarlo del coyote, aunque me costara tuve que admitir que todo fue gracias a Reese, al menos se acabó el probelma y eso me da ánimos para lo que estoy a punto de hacer.

Ya están terminando las clases, Damian y yo vamos tomados de la mano hasta la entrada de la escuela, Reese sonríe al saber que desde ahora es nuestra cita.

Pongo mis manos en su cintura, él pone las suyas en mis hombros:
— Bueno, tengo que irme, Luis quiere verte, supo la razón de mi tardanza ayer y quiere saber que estés bien, ¿quieres verlo mañana?

Me encanta ver cuando sonríe:
— Claro, sabes lo mucho que me agrada, es lindo saber que me empieza a querer también.

Nos damos un profundo beso, bajo poco a poco mis manos. Me asusta escuchar un claxon, es el padre tigre de Damian:
— Más te vale dejar las manos en donde estaban.

Nos separamos de inmediato ambos sonrojados:
— Lo siento, señor.
— Bueno, ya me tengo que ir, cuídate mucho y gracias por hacer esto.

Besa mi mejilla, sé que no puede besarme con libertad delante de su padre, bueno, el señor Blake es mucho más comprensivo.

Reese se aferra a mi brazo:
— Estoy listo para nuestra cita.

Eso hace que se detenga el señor Bruce estando disgustado con lo que ha escuchado, se da la vuelta para verme a la cara:
— ¿Qué es lo que ha dicho?

Damian trata de jalarlo por el brazo teniendo dificultades:
— Te explico luego... Vamonos.

Se van, pero me intimida su cara de querer matarme en ese momento, luego se retiran supongo que discutiendo del tema. Reese se ríe al haber visto esa escena:
— Te aseguro que con mi familia eso no pasaría.

Suspiro:
— Muy bien, ya tenemos que irnos, pasamos por mi hermano y...

Me interrumpe disgustado:
— ¡¿Qué?! Se supone que es una cita solo de nosotros, además, la última vez que nos vimos no nos llevamos muy bien.

Creo que puedo aprovechar la situación:
— A Damian eso no le interesa, de hecho trata de mejorar su relación con mi hermano y Luis no quería a mi minino.

Resignado acepta:
— Vamos por esa linda criatura.

Creo que esto puede funcionar a mi manera, nos dirigimos por mi hermanito, cuando llegamos Luis se cruza de brazos:
— ¿De nuevo él? No es Damian, yo quería verlo a él, y de nuevo está en mi lugar.

El dóberman se desespera:
— Llegué primero, tengo una cita con tu hermano, ahora puedes estar...

Lo interrumpo, creo que puedo hacer de nuevo lo de hace rato:
— Damian siempre deja que Luis se venga conmigo sin molestarse, bueno, a veces le deja el lugar porque han mejorado mucho su relación.

Sin mirarme se baja para dejar el lugar a Luis, esto funciona muy bien. No es correcto manipularlo, pero tampoco voy a dejar que se pelee con un niño de cinco años, menos si es mi hermano.

Mientras vamos en camino mi hermano da algunos toque en mi brazo:
— Henrick... ¿puedo quedarme con ustedes? No quiero estar solo.

Eso es el limite para Reese:
— ¡Ya basta! No voy a permitir que esto se arruine por su culpa, se supone que teníamos un trato, yo quiero una cita así como las has de tener con Damian.

Iba a decir algo, pero se me adelante Luis:
— Cuando quiero me deja ir con ellos, por eso me agrada más él.

Se enoja más:
— Detén el auto, de inmediato.