Maila Pavés es la hija de un empresario que cae en banca rota por lo cual busca casar a su hija con un el mafioso más temido Tomas Martini para que a cambio no perder su dinero. Lo cual pone muy triste a su hija ya que no se quería casar con alguie...
-Buenos días mi niña, tiene que levantarse, su padre la espera en una hora- dijo abriendo las cortinas.
-Okey- dije.
Ella se fue y me metí a bañarme, me puse ropa y baje a desayunar.
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Me senté en la mesa y mi nana me sirvió, y aproveche de preguntarle.
-Nana tu sabes quien va a venir? Bueno aparte de que le va a ayudar a mi papá.
-No mi niña su padre solo me digo que estuviera lista en una hora porque tenia que firmar un contrato, no me dio más detalles- dijo.
-Okey- dije un poco triste y desanimada no tenía ni siquiera ganas de haberme levantado y menos hoy.
-Pero trate de estar tranquila, se que es un mafioso pero a lo mejor no es mala persona- dijo tratando de hacerme sentir bien.
-Eso espero- le di una sonrisa apagada.
Cuando termine de desayunar llego mi papá al comedor y me dijo que el mafioso había llegado, hací que fuimos hacia la puerta.
Cuando lo vi entrar me sorprendió, no era alguien viejo como imagine sino alguien bastante joven hasta diría que 2 años mayor que yo, era un hombre bastante guapo y sexy, tenía los brazos y el abdomen marcados que se le notaban a través de la camisa aremangada por lo cual le vi unos cuantos tatuajes, media una cabeza más que yo, tenía el cabello negro y ojos azules!!, unos ojos que miraba y me derretían.
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Cuando deje de observar al bombón mire a mi papá que lo saludaba nervioso y con un miedo que se reflejaba en sus ojos.
-Ho...hola se..ñor Martini- dijo mi papá tartamudiando.
-Hola- dijo serio y con una voz tan varonil que me cautivo.
-Bueno señor le presento a mi hija Maila- dijo mi papá señalandome.
El me miró y me escaneo de arriba a abajo, quizás no fue buena idea ponerme pantalones cortos.
-Hola- dije con una voz tímida.
-Hola, pasemos a firmar el contrato, tengo cosas que hacer- dijo despreocupado.
-Si señor pasemos a mi despacho- dijo mi papá.
Cuando llegamos nos sentamos los dos juntos y mi papá al frente de nosotros, sacó unos papeles de un cajón y nos entregó uno a cada uno. Lo leí y decía que el ayudaría a mi papá con la empresa acambio de que tenía que casarme con el.
Nos pasó un bolígrafo para firmar, el firmo de inmediato, yo mire la hoja una vez más, no tenía otra elección, así que firme.
-Bueno trato echo señor Martini- dijo mi papá estrechando la mano con el.
-Si, bueno mañana en la mañana la paso a buscar para llevarla a mi casa- dijo levantándose de la silla.
-Okey, lo llevo a la puerta- dijo mi papá saliendo con el del despacho.
Yo fui a mi habitación, no podía creer que me iba a casar siendo tan joven, me hubiera gustado disfrutar un poco más, pero bueno por lo menos no era un viejo verde, quizás ni siquiera me preste atención.
Me pasé la tarde hablando con mi amiga Zoe por chat y poniéndola al corriente.
Chat: -osea que te vas a casar con un mafioso que esta más bueno que el pan!!- me reí por su comentario.
-Si pero no se lo digas a nadie, bueno espero que me vaya bien y no me haga nada.
-Si yo fuera tu me gustaría que hasta se aprovechara, pero entonces no vamos a poder salir al cine o a fiestas?- a mi también me gustaría que me violara, pero que estoy diciendo!!, me estoy juntando mucho con Zoe.
-Espero poder salir amiga, pero bueno cuando llegue allá te cuento como es.
-Ok, cuídate aunque con tremendo bombón- joder si que era un bombón.
-Jaja gracias.
Cuando termine de hablar con Zoe baje a comer algo, luego subí a pasar la tarde viendo películas. Me estaba quedando dormida por lo que me puse pijama me lave los dientes y me metí a la cama a dormir, mañana seria un largo día.
Narra Tomas
Cuando volví de hacer el trato me pasé la tarde en mi despacho arreglando cargamentos y firmando papeles, mientras lo hacía no dejaba de pensar en Maila tan linda y sexy chica, y ese cuerpo y como lo olvidaba, era de piel blanca, curvas bien definidas, cabello castaño y unos ojos color miel increíbles.
No podía creer que iba a vivir con ella y a casar!! joder, pero no me arrepentía. Sin más me fui a la habitación, me lave los dientes, me saque la ropa quedando en boxer y me fui a dormir y a esperar el día de mañana.
