Capítulo 5. Prisionera

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| Emma Stone |

Llegamos a la super mansión del amigo de mi padre y no exagero cuando digo que es super, el salón principal es más grande que toda nuestra casa en New York, me acerco a mi papá porque el muy grosero se alejó para hablar con su amigo rico y se olvidó de presentarnos.

 <<Que educación la tuya, papá >> 

Observo todo alrededor y me siento observada, miro hacia arriba, en las escaleras y ahí está, es un chico joven, creo que tiene mi edad, demasiado blanco y parece que se despertó del lado equivocado de la cama, su cara es demasiado sería e intimidante, me encojo un poco ante su mirada y vuelvo mi atención a mi padre, tiendo la mano a su amigo y parece que se sorprende un poco con mi acto.

— Hola, no fuimos presentados soy Emma Stone, es un gusto. —el señor toma mi mano y Dios mío, es muy helada.

— El gusto es todo mío, señorita Emma —toma mi mano y sus labios helados la tocan lo que me hace temblar. Alejo mi mano de él rápidamente porque su toque no me gusta, veo que mira arriba en dirección al chico que parece una estatua y le habla haciendo que baje— Christopher no seas mal educado y ya baja que de ahí no se hace nada.

Él chico baja y mientras se va acercando siento algo familiar en él, se para frente a mí y me de los pies a la cabeza algo molesto ¿Porque esta molesto? Yo nunca lo he visto mismo que presienta algo dentro de mí por tenerlo tan cerca, es una sensación rara y abrumadora, siento su respiración casi pegando con la mía y me tiende su mano y por educación tiendo la mía y cuando la toco es como si un corriente eléctrico congelante pasara por todo mi cuerpo, oigo su voz por primera vez y mi corazón sin razón parece que va saltar de mi pecho ¿Pero que está pasando aquí?

— Entonces eres tú la chica que me enseñará valores, genial

— ¿Valores? ¿De qué hablas? —pregunté sin entender y vi cómo nuestros padres cambiaron miradas— ¿Qué está pasando?

— Bien chicos ¿Por qué no nos sentamos? Tenemos mucho de que hablar. —dijo el padre del chico que me habló cosas raras y no sé de qué tanto tenemos que hablar si ni los conozco, eso no me suena bien. Miré y mi papá un segundo y se ve nervioso y ansioso, creo que esa charla no terminará nada bien—

— ¿Papá que está pasando? —me acerqué a él y lo tomé del brazo y me miró con los ojos un tanto aguados, ¿Por qué se puso así? ¿Por qué carajos estamos en este lugar?—

— Perdóname hija. —¿Qué? ¿Por qué me pide perdón? Nos sentamos en los sofás de la enorme sala de visitas y me pongo al lado de mi papá que no logra ni mirarme a la cara—

— Bien vamos directo al punto. Emma, estás aquí hoy por un motivo muy especial, yo y tu papá creemos que sería bueno que pasaras un rato aquí con nosotros, conociendo mejor a mi hijo Christopher, puede que se conviertan en amigos y tal vez en algo más, este es nuestro deseo.

— ¿Qué? ¿Qué es eso? ¿Algún tipo de boda arreglada? —les pregunté sin creer en lo que acabo de escuchar— Yo soy completamente capaz de poder elegir de quien quiero ser amiga y quien no.

— Pero parece que a nuestros padres les gustaría está "amistad" —Christopher hace colmillos con sus dedos— Pero nadie aquí es bobo papá, sabemos tus verdaderas intenciones ¿Verdad? Anda papá dinos realmente por qué estás haciendo esto. —su mirada a su papá es maliciosa con algo de rabia, ya no quiero estar aquí, quiero ir a mi casa quiero volver a la ciudad, este lugar me da malos sentimientos y no me gusta sentirlos—

— Papá por favor ¿Podemos irnos? Ya no quiero estar aquí. —le digo a mi padre y él se levanta y toma mi mano para irnos pero su amigo se interpuso y no nos deja pasar—

— Ella dijo que no Dimitri— dijo mi papá totalmente serio—, así que nos vamos a casa y ya veremos cómo resolveremos el otro asunto. —empezamos a salir pero se interpuso otra vez y no sé cómo pero dos chicos creo que de la misma edad de su hijo aparecieron y se pusieron de su lado impidiéndonos salir, agarré el brazo de mi padre y me pegué más a él pero uno de los chicos me separó de mi padre y empecé a patear para soltarme pero el chico es muy fuerte—

— Oh no, no no Philip ese no fue el acordado, yo hasta iba a dejar que se fuera a su casa, pero como sé que no eres un hombre de palabra y ahora se quedará aquí bajo mis ojos, hasta que cumplas con tu parte del trato.

— Está bien, Dimitri, lo resolveremos pero no así, ¡Suelta a mi hija! —mi padre grita y empiezan alejarme de él y llevarme a algún lugar feo y oscuro que no me va gustar para nada—

— ¡PAPÁ!— grité con todas mis fuerzas mientras aún seguía pateando—¡Suéltenme, idiotas!— les dije pero todo fue en vano, ellos no me soltaron.— ¡Suéltenme o se las verán conmigo, malditos infelices!

— ¿Ah sí? ¿Y cómo se supone que lo harás, niña?— se burló uno de los hombres que me tenía agarrada— ahora quédate quieta, pareces gusano. —dijo el chico moreno aventándome en una habitación y me encerró ahí adentro, grité y patee pero nadie vino a mi auxilio, grité a mi padre pero creo que nadie me oye y nadie vendrá por mí, estoy sola









| Christopher |

— En serio padre, ahora te pasaste, no que conozcas límites ¿Pero que pretendes hacer? ¿Mantenerla prisionera hasta que nos casemos? —le pregunté enojado y me ignora completamente— ¿Esto es en serio padre? ¿Todo por unos miseros dólares?

— No es solo por unos míseros dólares, Christopher. Yo sé que esta chica vale mucho más que esto, y es mejor tenerla a nuestro lado que contra nosotros. —no hace ningún sentido lo que dice mi padre y le cuestiono su genial idea

— Oh claro y pretendes hacer eso manteniéndola como prisionera, claro padre esto es perfecto. —dije irónico y se acercó poniendo su mano en mi hombro y mirándome directamente a los ojos

— Esa será tarea tuya, yo no tengo que decirte como conquistar a una chica ¿O sí? —soltó una risita maliciosa y de una quitó su mano de mi hombro ya ha pasado de los límites

— Okey, esto se acaba ahora, la voy a soltar y volverá a casa con su padre, esto es muy ridículo, papá, no estamos en el siglo pasado, no puedes tener personas como rehenes, cerradas en un calabozo. —empecé a salir y otra vez me detuvo

— Lo harás si quieres seguir siendo un vampiro Christopher, si quieres que tu inmortalidad prevalezca harás exactamente lo que te digo. —puso sus ojos rojos y hace mucho que no lo veo hacer esto, igual pongo los míos para alejarlo otra vez de mí, hace mucho no siento miedo de mi padre, pero cuando se pone en este plan si hay que temer, pero yo no soy más un chiquito asustado, no puede controlarme más

— ¿De qué mierdas hablas? Ella no ofrece ningún riesgo para noso...— me interrumpió 

— No hasta ahora Christopher, ¿Pero ya te preguntaste que hacía su madre? ¿CÓMO MURIÓ? ¡ERA UNA CAZADORA CHRISTOPHER! Y fue ella la responsable de la muerte de TU madre, esa chica no es mortal, ella solo no sabe el poder que tiene en manos, y si fuera tú haría de todo para que no descubra, yo no sé como lo harás, si vas a manipularla, si usarás de tu charme natural que funciona con todas las chicas, pero la dejaras enamorada, antes de que te mate e igual a todos nosotros, el futuro de nuestra raza esta en tus manos Christopher, así que no seas idiota y haz lo que te digo.

Yo no puedo creer, no puedo, esto no puede ser verdad, y sí es ¿Cómo es posible que me pida eso? ¿Estar con la hija de la mujer que mató a mi madre? ¿Qué le pasa?  

Amor Sobrenatural || Emma Stone & Christopher VélezDonde viven las historias. Descúbrelo ahora