| Harry Potter | El Legado del Inefable

Capítulo 23- El Caos Feérico en la Clase de Lockhart

—Nada es imposible, solamente no se ha logrado aún...

Es importante mencionar que todos los derechos de autor de Harry Potter pertenecen a su autora, J.K. Rowling. Este fanfic es simplemente una adaptación de su historia y no pretende ser otra cosa.

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Harry estaba parado justo en frente del salón de la clase de Defensa Contra las Artes Oscuras, perdido en sus pensamientos, cuando fue detenido por un pequeño león de Gryffindor. Era un niño que había sido seleccionado.

 Colin Creevey...

Colin era delgado y de baja estatura para su edad. Tenía una apariencia juvenil y sus rasgos faciales reflejaban su apego a la niñez. Su cabello corto de un castaño claro parecía desordenado debido a su energía y entusiasmo.

Sus ojos grandes, de un azul brillante como el mar, se iluminaron con admiración y fascinación al acercarse a Harry Potter. Su rostro mostraba una expresión perpetua de asombro y admiración, con una sonrisa entusiasta que rara vez desaparecía de sus labios.

—¿Deseas algo, Colin? —preguntó Harry, levantando una ceja.

Los ojos azules de Colin se abrieron con admiración mientras abría la boca, la cerraba y luego volvía a abrirla para preguntar:

—¿S-sabes mi nombre?

—¿Es un pequeño fanático de Harry? —preguntó Pansy con una sonrisa divertida.

—Eso creo —respondió Cassiopeia de la misma manera. Sus ojos analizantes observaban las expresiones de Harry mientras saboreaba la forma en que trataría al niño.

—Claro que sí. Te vi en tu selección, Colin —murmuró Harry con tono de voz monótono.

—Uh huh... uh... y-yo... ¿podría tener una foto tuya? —preguntó Colin, levantando su cámara nerviosamente ante la mirada de los cinco Slytherins detrás de Harry.

—¿Quieres una foto? —preguntó Harry sin entender.

—¡Así es! ¡Así puedo probar que te he conocido! —gritó Colin con entusiasmo—. He oído todo sobre ti, me encantaría enviarle una foto a mi hermano. Sería genial tener una foto tuya. Y luego, tal vez cuando hayas terminado, ¿podrías firmarla también?

"¡Colin, por favor!"

"No me dejes... hermano..."

"Te mereces el título de la Primera Orden de Merlín, Colin Creevey..."

"...Porque tu título será un testimonio perdurable que nadie te podrá quitar..."

Harry entrecerró los ojos cuando las voces comenzaron a surtir efecto una vez más. Sin embargo, no se alejó de sus amigos ni del pequeño niño que estaba casi saltando de emoción con las manos alrededor de su cámara.

—Uh, señorita —preguntó Colin con timidez, acercándose a la serpiente menos intimidante, Hermione Granger—. ¿Podrías tomarnos una foto, por favor?

—Me encantaría —respondió Hermione con una sonrisa.

Cuando tomó la cámara, Harry finalmente reaccionó. Se agachó a la altura del pequeño niño y rodeó su brazo alrededor de él mientras sus labios se curvaban lentamente.

—¡Gracias! —gritó Colin, corriendo emocionado hacia su salón de clases.

"Colin Creevey", pensó Harry con interés.