_"ugh.. no puedo creer que tengo que volver a ver a ese idiota"_ Habló enfadado el argentino mienstras arreglaba sus prendas de ropa. Se reflejaba en aquel gran espejo, observando con atención a su expresión en el rostro. Estaba enojado, demaciado, no podía parar de pensar en aquella familia inglesa que estaría en su casa en cuestión de horas, asqueandole completamente esa idea que tuvieron sus padres con aquellos hombres, un "bello encuentro entre ambas familias".
Miraba su celular, viendo su hora, aún era temprano, tenía tiempo de escaparse, pensando bien aquella idea. No tenía ganas de ver aquellos rostros falsos que solo iban a su casa con el único propósito de hacer negocios con sus padres, menos de ver al hijo de aquellos, es lo que más le molestaba.
Su mirada de rivalidad, esos ojos que reflejaban maldad, esa sonrisa macabra, eran cosas que describían a ese muchacho. No entendía por qué tanta emoción tenían ambas familias de hacerlos conocer mejor, bueno, si sabía, pero estaba claro que no haría nada para poder conocer más a pecho a ese idiota, no quería, no podía, le asqueaba por completo su persona, era irritante y competitivo, sin ningún motivo querría salir con un tarado como él.
Además, estaba mejor solo, no tenía quien le este molestando detrás suyo o le esté pidiendo amor y esas cursilerías. No tenía tiempo para sentir esas cosas y si los tuviera tampoco lo buscaría, no estaba para nada interesado en buscar algún tipo de relación amoroso con nadie.
Mucho menos con ese estúpido, Estados Unidos.
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Las voces resonaron en su hogar, escuchando como lo llamaban.
El argentino bostezo, mirando sus uñas, necesitaban una rápida seción de manicure, quizás iría en la semana, odiaba tenerlas débiles y feas.
Estaba en la piscina de la casa, solo y escondido, sin ninguna intención de salir de allí y ninguna sensación de "pena" o algo así por sus padres.
Reía mienstras miraba aquella bella noche: las estrellas tan brillantes, esa luna redondita, sin ninguna nube que molestara en medio, una noche despejada y hermosa.
Suspiró hondo y cerró sus ojitos, sintiendo paz y tranquilidad. No se preocupaba de que lo fueran a encontrar, sinceramente era lo último que temía. Por el momento solo se procuraba de estar tranquilo y disfrutar de esa agua tibia y ese hermoso paisaje que le otorgaba la noche, sin padres, sin invitados, sin Estados Unidos, sólo él y la luna de compañía.
Y cuando menos se esperaba una sorpresa, cayó el personaje menos esperado.
_Is this your way of escaping from me?_(¿Esta es tu forma de escapar de mí?) Dió un saltito en el lugar, mirando para arriba y deseando no haber escuchado esa horrible voz. Para su mala suerte no había sido producto de su imaginación, aquel hombre repugnante estaba enfrente suyo mirándolo con su mejor cara de burla.
