Los días de estudio de esta semana estaban casi llegando a su fin y por mi cabeza siempre se repetía la misma pregunta que había leído hace relativamente poco.
"¿Confiarás en el que te traiciona?"
Me había mantenido alejada de todos ellos.
De todos los que me habían metido en su grupo como si nada.
Pero eso me extrañaba y no hablo de que hice, si no de lo que ellos hicieron.Nadie es así.
A pesar de haber perdido completamente la memoria era algo que sabía.
No tenía recuerdos del pasado, pero tampoco quería decir que yo hubiera nacido ayer.
Sabía que era el mundo, o eso creía.Nadie te abre las puertas de su casa y te deja entrar sin saber quien eres, pero ellos hicieron algo parecido.
¿Por qué?En el caso de que ellos me preguntaran el por qué de esa repentina desaparición, yo diría que era por temas de estudio o algo por el estilo.
Pero es que lo mejor para todos es que me separe por un tiempo, tengo que investigar por mi cuenta un poco.
No puedo tampoco depender de ellos.Me encontraba tirada en la cama, cansada de la primera clase, estaba harta de dar dones.
Me explicaron 500 y ninguno me era útil por el momento .Miré el reloj de mi pared y eran las once menos cuarto, por lo que decidí ir a la clase de historia impartida por Cassian.
Salí de mi dormitorio con la mochila, tenía que llegar en 10 minutos a la clase.
Mientras iba caminando hacia allí se me venía a la cabeza la última clase que tuvimos de esa asignatura.
No se me hizo pesada, al contrario, la clase del martes estuvo bastante bien.Ya había llegado a la clase.
Emery estaba sentada en el mismo sitio que ayer, y yo como no, me senté a su lado.Varios segundos más tarde Cassian apareció.
La clase comenzó y en la pizarra empezó a escribir.
"Seguir las reglas"
-Bueno, ¿qué pensáis sobre las reglas?- preguntó como si nada el maestro- Busco sinceridad- acabó diciendo.
-Pues que no sirven para nada- comentó alguien del fondo entre carcajadas.
-Bien, ¿alguien más opina lo mismo?- dijo Cassian.
Nadie dijo nada.
-No busco que os calléis, si no que habléis- dijo.
-Que si están será por algo- dijo otra persona desde el fondo.
-Vale, tenemos dos opiniones distintas, ahora levantad la mano quien piense lo mismo que vuestro primer compañero, "las reglas no sirven para nada".
Varias personas levantaron la mano, menos de la mitad.
Yo sinceramente no iba a levantar la mano en ninguno de los dos casos.-Entiendo que el resto vota la segunda.
Nadie dijo lo contrario.
Borró lo que había escrito en la pizarra.-Ninguno lleváis razón- soltó como si nada.
Todos nos quedamos mirándole.
-Bueno según mi punto de vista- dijo- Los que habéis dicho que hay que seguirlas, si hay una regla en la escuela que diga que tenéis que acabar con vuestra vida, ¿lo haríais?- continuó.
Todos empezaron a mirarse unos a otros y empezaron a negar con la cabeza.
-Y los que habéis dicho que no sirven, queréis decir que las reglas de la escuela que dicen que no hay que hacer daño a otro alumnos está mal- dijo provocando la misma reacción en el resto.
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Rurnore: Ocultos
FantasyA veces una simple historia es capaz de sellar el secreto más oscuro. El caos se puede desatar con una simple palabra y se puede frenar con un derramamiento de sangre. Algo se puede perder igual de rápido que lo hacen los granos de arena de un reloj...