Capítulo 28- El Descenso a la Cámara Secreta

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Nada es imposible, solamente no se ha logrado aún...

Es importante mencionar que todos los derechos de autor de Harry Potter pertenecen a su autora, J.K. Rowling. Este fanfic es simplemente una adaptación de su historia y no pretende ser otra cosa.

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El Basilisco sería una serpiente gigante, de aspecto temible, con escamas de color oscuro, como el verde oscuro o el negro, adornadas con motas de colores rojos o dorados. Tendría una cabeza distintiva, con una corona de espinas puntiagudas en su cráneo, lo que le da una apariencia real y amenazante.

Los ojos del Basilisco serían su arma más temible. Tendrían un brillo hipnótico y deslumbrante que podría atraer a cualquier criatura que los mirara directamente. Una vez que el Basilisco fijara su mirada en su víctima, desencadenaría su Mirada Asesina.

El Basilisco sería inmune a muchos ataques y venenos debido a su naturaleza mágica. Además de matar con la mirada, podría liberar veneno corrosivo de sus colmillos y producir un aullido ensordecedor que paralizaría a sus enemigos momentáneamente.

El Basilisco viviría en lugares oscuros y remotos, como cuevas profundas, pantanos tenebrosos o ruinas antiguas, donde pudiera acechar a sus presas sin ser detectado.

La creación de Basiliscos ha sido ilegal desde la época medieval, aunque la práctica se oculta fácilmente colocando el huevo de gallina debajo del sapo. Sin embargo, los Basiliscos son incontrolables, excepto para los hablantes de Parseltongue. Son tan peligrosos para los magos oscuros como para cualquier otra persona, y no se han registrado avistamientos de Basiliscos en Gran Bretaña durante al menos quinientos años.

El primer Basilisco registrado fue criado por Herpo el Loco, un mago oscuro griego que hablaba Parseltongue. Después de muchos experimentos, descubrió que un huevo de gallina incubado debajo de un sapo produciría una serpiente gigantesca con poderes extraordinariamente peligrosos.

—No puede ser posible, ¿cierto? —pregunto Cassiopeia con la voz temblorosa.

La presencia de un Basilisco de más de mil años acechando los pasillos del Castillo de Hogwarts era simplemente inconcebible. La simple idea de enfrentarse a esos ojos asesinos era suficiente para helar la sangre incluso al mago más intrépido de toda Gran Bretaña.

—Pero no Petrifican —murmuro Pansy.

Daphne suspiró por unos momentos. Las imágenes que vio frente a ella en cada secuestro o "petrificación" comenzaron a suceder sucesivamente en su astuta cabeza. Primero fue la Sra. Norris; Petrificada con un mensaje de sangre escrito en la pared y pequeños cristales fijos en el suelo.

Cristales...

La segunda víctima fue Colin Creevey, el niño que le pidió una foto a Harry y fue petrificado usando su cámara mágica...

Cámara...

La tercera víctima fue Justin Finch-Fletchley, estudiante de Hufflepuff petrificado y encontrado con Harry en la escena del crimen gracias a Peeves, quien comenzó a gritar cuando Nick...

¿Fantasma?

Penelope Clearwater...

Los ojos de Daphne se abrieron de par en par cuando miró fijamente a Hermione, quien estaba jugando con un espejo en su mano.

—Todos no lo miraron fijamente... —murmuro Daphne.

—¿Qué quieres decir? —preguntó Cassiopeia.

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