Gold rush. [MINSUNG]

Daylight.

¹⁵

Minho y yo estábamos en mi cuarto, sabíamos que algo iba a pasar por qué estábamos incómodos de la buena forma, nos tocabamos discretamente y de vez en cuando nos besábamos.
Ese día no había nadie en casa, mi cama era increíblemente pequeña y Minho increíblemente grande que casi estaba encima mío.

Los dos queríamos llegar a algo más y nos dimos cuenta cuando pasamos cinco minutos besándonos, el abrió más mi boca para meter su lengua y me acorraló en la cama.

Comenzó a desabrochar mi camisa mientras dejaba besos por mi pecho, miro el collar con la M tocando mi piel descubierta, los dos nos reiamos de vez en cuando por la vergüenza que esto nos causaba.

El se sacó la camisa y abrió mis piernas para meterse entre ellas, mi pantalón era de joggin entonces lo bajo con facilidad,  me dió besos en los muslos y subió nuevamente hasta mis labios.

Jamás había visto un cuerpo tan perfecto como el de Minho, su pecho estaba tonificado por que el iba mucho al gimnasio en sus días libres, le hacía mucho efecto.

Sonreí y el se pegó a mi antes de sacar un condón de su pantalón y dejarlo en la mesa de luz.

—¿Tu vas a estar arriba?
—Si tu quieres.
—Me siento mas cómodo así por ahora.
—Bueno pero yo también quiero probarlo luego.—Me dijo dejándome un beso en los labios, éramos adolescentes experimentando cosas nuevas.

Nos queríamos mucho, el lo decía todo el tiempo, lo dijo cuando se sacó el pantalón, cuando me saco la ropa Interior, cuando comenzó a prepararme y más cuando ya estaba dentro mío.

Mis piernas se enlazaron a su cintura mientras el se movía lentamente dentro mío, tire mi cabeza hacia atrás gimiendo por la sensación agridulce entre el dolor y la pasión que poco a poco se convertirá en más pasión.

Los dos terminamos rápido, fue por la emoción, pero cuando intentamos nuevamente pudimos tener dos rounds más.
Admito que ver a Minho saltando encima de mi fue la mejor imagen que jamás había visto.
El movia sus caderas y yo lo ayudaba a dar pequeños saltos mientras nos besábamos.
Arqueó su espalda moviéndose más rápido, íbamos al ritmo que el quería el cual era bastante acelerado, su rostro sonrojado, su cabello sudado y su cuerpo igual, era un espectáculo para mí.

Me puse igual que el en el tercer round que tuvimos, no estábamos nada cansados pero cuando yo monte a Minho los dos quedamos exaustos, por que mientras yo saltaba el movia sus caderas de arriba a abajo para llegar más a fondo.

Fue una de las mejores sensaciones que experimente, no tuvimos inconvenientes por el rol que tomaba cada uno por que nos sentimos cómodos haciéndolo de las dos formas.
Se sentía placentero poder ver a el otro en una posición de debilidad y luego se sentía bien sentir como tomábamos el control.

Sabíamos que luego de experimentarlo por primera vez íbamos a querer hacerlo todo el tiempo, aun que nos controlamos bastante bien el resto de la noche.

(...)

Daylight -Taylor swift)

Changbin estaba afuera con un ramo de flores, no creí que lo volvería a ver en el verano pero el estaba afuera esperando, no le abrí hasta que se largo la lluvia.

—No deberías estar aquí.
—¡No!, no aceptaré un no por respuesta, por que tienes miedo, y lo entiendo, entiendo que tengas miedo y que pueda asustarte pero yo quiero ayudarte, quiero estar contigo y no puedes decirme que no por que no sabes cómo será si no lo intentas.—El estiró las flores y yo me asuste tomandolas, estaba muy serio hablándome de todo eso y yo solo sonreí por lo tierno que se veía.—Entonces no, no quiero que me digas que no, no quiero que tengas miedo, quiero que seas mi novio, quiero que nos demos besos, y quiero cenar aquí y dormir a tu lado hoy.
—¿Acabas de invitarte a mi casa?
—¡Si!, por qué acabo de decidir que somos novios y no puedes cambiar de opinión.
—¡Pero!, no puedes decidir eso por mi ¿Lo sabes?—Sonrei, por que ya no podía más con el.—Lo aceptaré solo por que trajiste mis flores favoritas.
—¿Eh?—Se quedo confundido ante mis palabras.—Crei que dirías que no.
—Vamos a hacerlo, creo que sería lo mejor, por que veo que tus intenciones son buenas y no quiero tener miedo, quiero que seamos novios.
—¡Encerio!—Parecia un niño, me abrazo levantándome para girarme y yo solo me sostuve de el con las flores.

Me dejó en el piso y yo lo mire con una sonrisa cuando antes de reaccionar ya estaba besandome, no supe que hacer en el momento pero el movió sus labios entonces le seguí el ritmo, lo abraze y suspiré por que aún que tuviera una vida difícil creo que podía aprender a sobrellevarla.
Por qué Changbin estaría allí.

Los dos cocinamos mientras mi hermana jugaba, el jugo mucho con ella hasta que comimos, los tres miramos unas películas de Barbie a pedido de la menor de la casa y luego nos fuimos a dormir.

El me abrazo y yo solo me acurruque en su pecho, por que allí me sentía muy seguro, me senti tranquilo, su perfume era rico, lo oli por mucho tiempo hasta que el comenzó a darme besitos en el rostro.

Sabia que no sería un camino fácil pero deseaba estar con Changbin en todo ese camino, esperaba que el se quedará conmigo por qué encerio quería que lo hiciera.

Creo que estoy un poquito enamorado de el, solo espero que nunca vea ese dibujo que hice de el aquel día en la cancha el día que sabia que me había enamorado.

(...)

Hyunjin había estado conmigo todos mis meses de recuperación en casa, fue lo mejor por que logre llegar a un peso ideal luego de mucho sufrimiento por no poder subir de peso, el quito todas las balanzas de la casa para después hacerme de comer.
Los dos decidimos ir a la misma universidad y vivir como roomies,  era lo mejor y siempre quise vivir con el, aun que Hyunjin pasaba 20 de 24 horas en mi casa.

—Sabes, cuando seamos mayores quiero casarme contigo.—Me dijo el mientras yo me sentaba en la mesada viéndolo cocinar.
—¿Es una propuesta de matrimonio?
—¿Quieres que lo sea?—El alzo una ceja mirándome y tomo una rama de perejil volviendola un anillo.

Me baje de la mesada y el se arrodilló frente a mi con la hoja de perejil.

—Lee felix, amor de mi vida ¿Te gustaría casarte conmigo?
—Eres un romántico.—Le dije dándole la mano, el me puso el anillo de perejil.—Hey, ahora estamos comprometidos de verdad más te vale que no te arrepientas.—Se levanto y me tomo de la cintura con una sonrisa.
—Jamas me arrepentiría de tenerte junto a mi cielo.—El me beso, me beso con amor, como siempre, todos sus besos siempre se sintieron como amor pero este mucho más.

Decidí que este era el momento, por que ya me sentía seguro para poder tener aquello que tanto nos gustaba hacer, lo mire cuando le tome por la camisa y le pase los labios por el cuello.

—Tengo muchas ganas de que adelantes la noche de bodas.—Susurre, el me miró y yo solo asenti con una sonrisita.

Hyunjin era una fiera en la cama, aun que ahora no estábamos en la cama si no que me tenía contra la mesada, era mi fantasía erótica de toda la vida.
No me sentía mal, lo disfruté mucho por qué Hyunjin a pesar de ser un maniático sexual lo hacía con mucho cariño, me daba besos y me decía palabras bonitas, antes, en y después de el sexo.

Siempre lo hizo así, y es una de las cosas que siempre me van a volver loco de el.