Engaño - Michaeng (G!P)

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Se preguntarán ¿Cómo es que Mina sabe y está tan segura que su hija es de Chaeyoung y no de Bambam si con ambos tuvo sus encuentros?

Mina al tener a su hija no podía con la intriga de saber de quién era su niña ya que ni ella lo sabía, así que una noche decidió averiguarlo. Tomó el cepillo de su novio y arrancó unos cabellos de él ya que su cabello era un tanto largo y mientras peinaba a su hija para llevarla al jardín hizo lo mismo y los guardó en dos bolsitas diferentes.

Ese día salió de la ciudad a hacer unas diligencias y en eso fue a realizar una prueba de ADN para que nadie de ahí se pudiera enterar y corra el chisme.

Al recibir la hoja donde decía el resultado, regreso a la ciudad, no fue a su casa sino a la de Sana, su mejor amiga, ella era la única que sabía lo que está pasando con Mina y supo que se haría una prueba.

- Y bien? Cuál fue el resultado?- Sana dijo apenas Mina llegó y se pusieron cómodas.

- Aún no lo sé Sana, tengo miedo de ver el resultado y que sea lo que he estado evitando- con mucha preocupación dijo.

- Tranquila, sea cuál sea el resultado yo siempre te apoyaré-

- Gracias amiga, no sabes cuánto te agradezco de que estés conmigo.

Sana al ver cómo temblaban sus manos teniendo el papel, decidió agarrar el sobre y sacarlo para mirarlo primero ella y hacerlo más rápido.

Al abrirlo y leer lo que este decía, se dió cuanta de una triste verdad para su amiga.

- ¿Que dice?- Mina al ver que no mostraba ninguna reacción, habló.

- Mina.. Sofi no es hija de Bambam- dijo asustada su amiga, en ese momento a Mina se le cayó el mundo encima, tenía la sensación de que eso podría ser verdad pero también tenía esperanza a que no.

- No, esto no puede ser, dime qué estás bromeando- miro a su amiga pero su expresión era la misma y no parecía querer reírse- ¡Que voy a hacer! ¡Mi hija ama a su papá, no la puedo alejar de él!- sus lágrimas, que estaba reteniendo desde que supo que Sofi no era hija de Bambam por fin descendieron.

- Y no la vas a alejar Minari- la abrazó- Bambam siempre será su papá, porque es quién la ha querido y la ha cuidado. Sé que esto puede cambiar muchas cosas, pero mientras no se enteren, todo estará bien, aunque sabes que la verdad siempre sale a ns luz, ahora en lo único que debes pensar es en tu hija, Mina, ella tiene que ser tu motor y tus ganas de seguir luchando por hacerla feliz.

- Mi hija siempre será lo mejor que me ha pasado en la vida, no quiero que ella sufra.

- Y no lo va ha hacer si hablas antes con Bambam, él tiene que enterarse, para que busquen una solución.

- No, yo no tengo el valor para contarle todo y que se entere que lo engañé.

- No si le dices porqué lo hiciste, no lo hiciste porque querías hacerlo con ella, o porque querias experimentar, lo hiciste por miedo a perder una materia y que tus padres te regañen.

- Lo voy a pensar, tengo que saber lo que voy a hacer, si le digo todo lo que pasó o desisto de la idea.

- Está bien, sabes que pueden contar conmigo si algo sale mal, suerte amiga.

- Gracias, te quiero mucho.

- También te quiero- se abrazaron y despidieron para que Mina regresara a su casa.

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Todo el día estuvo de mal humor, su pequeña ya se había dormido, pero Mina, por más que lo intentó, no pudo conciliar el sueño.

Estaba por quedarse al fin dormida, pero algo la tenía que interrumpir, y ese algo fue una notificación que le llegó a su celular, sacó su teléfono y al abrir los mensajes se dió cuenta de que era un número desconocido, al mirar su foto de perfil se dió cuenta de quién era, la responsable de su mal humor ese día.

- Hola preciosa, todavía no lo puedo creer que tengo una hermosa hija.

- Gracias a ti, mi vida se puso patas arriba.

- Pero no fue todo mi culpa, al menos hubieras tomado la píldora del día siguiente. Pero ya no podemos cambiar nada, ahora hay que pensar en como decirle a nuestra hija que soy su mamá.

- No quiero que ella sufra Chaeyoung.

- Y no va a sufrir, si le damos el amor que siempre tuvo y tendrá.

- Pero ella quiere demasiado a su padre.

- No digas padre Mina, él no es nada para ella, yo soy su mamá y no lo puedes cambiar, ahora que lo sé no me voy a apartar de mi hija.

- Eres una maldita egoísta!

Sin nada más que decirle, salió de los chats y apagó su celular, para no despertar a su pequeña se fue al baño de su habitación a llorar, llorar por lo desastrosa que estaba siendo su vida en ese momento, eran la 1 de la mañana y sus ojos ya no podían más, sus lágrimas se secaron y al fin se quedó dormida.