Me desperté y vi a nikol dormida y se me ocurrió una idea, pintarla
-Mi venganza pequeña mocosa del diablo -dije mientras le pintaba la cara con plumon-
Termine de pintarle la cara y después sacudí sus hombros para que se levantara
-¿Que paso? -dijo nikol con sueño-
-Vamos a desayunar, te espero abajo
-Okey...
Baje las escaleras y vi a Claudia haciendo el desayuno
-Buenos dias -dije mientras le di un beso en la mejilla-
-buenos dias Madison, ¿no se ha levantado nikol?
-Dice que ahorita ya baja -dije y se escucho un ruido, volteo para ver quién era y era nikol con la cara toda rayada-
-Dios mío nikol ¿Que te paso? -dijo Claudia y después volteo a verme lo cual yo estaba riéndome como loca- por seguro fuiste tu Madison Klein
-¿Que tengo en la cara? -dijo nikol confundida-
-Vete a ver en el espejo -dije mientras intentaba no reírme-
Nikol fue al baño y solo pude escuchar como gritaba mi nombre y me empeze a reír
-Hija de la chingada ven para acá -dijo nikol y yo solo me fui corriendo-
-¡Fue mi venganza!
Nikol me estuvo persiguiendo por toda la casa hasta que Claudia nos habló
-¡Niñas la comida ya está!
-Ya oíste nikol, hay que ir a comer
-pero primero te matare niña
-fue mi venganza, estamos a mano
-Esta bien -Dijo y se volteo para ir hacia la cocina-
Fuimos a sentarnos a la mesa y mientras desayunamos vimos entrar a mis padres
-Hola niñas -Dijo mi madre mientras se sentaba-
-Claudia vamos a desayunar con las niñas -dijo mi padre mientras también se sentaba-
-Claro, ahorita les traigo su desayuno
Claudia se fue a la cocina
-Madison tienes un casting en la tarde
-Eh? Hoy en la tarde?
-Si
-¿De que es?
-De modelaje
-ah yo pensé que para una película
-Ya platique con un amigo y pronto hará un casting para una película, yo te aviso
-okey -Dije y después mire a nikol-
Acabamos de desayunar y nikol y yo nos subimos a arreglar
-¿Crees que me quedé?
-Claro
Le di una sonrisa a nikol y me devolvió la sonrisa
-¡Niñas ya vamonos! -Grito mi padre desde el piso de abajo-
-Vamos
Bajamos las escaleras y nos subimos al auto para irnos
En todo el camino iba hablando con nikol, hasta que ya habíamos llegado al lugar donde sería el casting
-Hija tu tranquila, no tienes porque estar nerviosa
-no te preocupes padre, no estoy nerviosa
Eso era mentira me estaba muriendo de los nervios
Entramos al lugar y habían más gente, me puse la ropa que me había dado mi madre, era una falda negra y una blusa corta blanca Toda la gente y yo pasamos por números y ya era mi turno
Termine de hacer el casting y me fui a cambiar
-Nosotros le hablaremos a los que se queden -dijo una mujer, alta y de ojos cafes-