Donde caben dos caben tres • Xiaotherven

2.

Fin de semana

Es sinónimo de descanso, tiempo libre sin trabajo que hacer, tiempo libre para uno mismo en el que se podía estar en paz.

O al menos esa era la definición que le había puesto Xiao ese fin de semana.

El sonido de la puerta de su habitación abriéndose se pudo escuchar con él aún dormido, luego se pudo sentir como el peso sobre el gran colchón de su cama cambiaba y empezaba a sentir una mano acariciando parte de su melena azabache y verde despeinada despertándolo de a poco.

Este se revolvió entre sus sábanas escondiéndose más, ya se puede hacer una idea de quién se trataba —Venti... no me despiertes tan temprano — se quejó.

Se pudo escuchar una risita del nombrado.

—Pero si es medio día.

—Como te dije... temprano... —Dijo este para luego taparse totalmente con las sábanas.

Venti al ver esto sonrió divertido —Tú dijiste que te levantara temprano para terminar de pintar la máscara, a todo esto ¿Dónde está? Quiero ver como va — Dijo este inspeccionando con la mirada por toda la habitación mientras se levantaba de la cama para buscar el objeto mencionado

Esa pregunta alarmó instantáneamente al más bajo, tomando el brazo de su pareja antes de que se alejara.

—No, todavía no ha secado, además no está lista, no la verás hasta que esté lista.

Dijo este mientras le halaba suavemente del brazo para que se acercara a la cama y tomara asiento nuevamente.

A lo lejos en una mesita se podía ver una máscara de papel maché con cuernos pintada a medias, junto con unos potes de pintura acrílica y unos pinceles, un poco cerca de la mesa habían varias telas sobre una silla y un maniquí de un torso tapado por una manta un tanto vieja para ocultar el traje que estuviera haciendo el de mechones verdes.

—¿Queee? Pero ya quiero verla —contestó a su pareja haciendo un puchero —Me muero por ver los trajes también, nos quedarán estupendos, más porque los hiciste tú —agregó para después dejar un pequeño beso en los labios del contrario.

El de mechas verdes desvío la mirada levemente sonrojado con nerviosismo, jamás se acostumbraría a los cumplidos sobre él o sobre su trabajo, menos si los hacía Venti.

Xiao tenía de hobbies muchas cosas relacionadas con las manualidades, una actividad donde podía implementar muchas de estas cosas era el cosplay, lo cual le apasionaba mucho desde hace años, el solía crear cosplays tanto para el como a pedido.

Uno de sus mayores apoyos para tener tanto esfuerzo y dedicación en ese hobbie era Venti, el cual era acérrimo fan de todo lo que creara su novio.

Ahora el de mechas verdes estaba haciendo uno para él y otro para Venti, y no era la primera vez, pero esta vez era un tanto especial, dado que eran sus personajes favoritos de una novela que tanto a Venti como a Xiao le tuvieron mucha obsesión hace unos años.

Recientemente se había confirmado una adaptación animada y era algo que a ambos les emocionaba demasiado, por lo que Xiao tuvo la idea de que hicieran cosplay de esos personajes para la próxima convención a la que planeaban asistir, que cabe decir tenían un gran parecido, tanto en personalidad como parcialmente en físico, y en la historia que tenían ambos personajes en conjunto.

Era como una pareja hecha específicamente para ellos.

Claro que a Venti le encantó la idea y lo esperaba con ansias.

El más bajo reafirmó más su agarre al brazo del de trenzas mientras que con su otra mano libre le tomaba de la cintura para acercarlo más a él —Pues tendrás que esperar... Serás un muy lindo Barbatos