Las clases transcurren de lo más normales en el salón de la universidad que estudio.
Eso quiere decir que hay algunos que están durmiendo sobre sus pupitres mientras el profesor explica sobre cómo poner una inyección, otros están viendo su celular sin hacerle el más mínimo caso a aquel hombre que se cansa y cansa de explicar; y otros como yo que se sostienen en está costosa universidad con una beca, que tengo que mantener mi puntaje entre los primeros para seguir estudiando, me quedo mirando fijamente cada una de las indicaciones que da para no sacarme alguna mala nota en los exámenes o en la práctica.
Tengo que matarme estudiando mientras los demás pasan pagando, esto no es para nada justo, la vida no es justa.
Denki que es mi compañero de aula y de asiento (aparte de mi mejor amigo) que normalmente está igual de atento que yo (pues también está con una beca) hoy simplemente está como la chica de nuestro lado, mirando fijamente su celular como si hubiera algo interesante, quizás mirando la inyección personal de Shinsou, pues desde que llegó ha estado mensajeando con él.
Como si Shinsou le fuera dar algunas respuestas a la hora del examen pero simplemente lo dejo estar pues no me puedo permitir perder ninguna de las palabras que el hombre de traje gris y completamente joven pronuncia, ni por lo guapo que es atrae la atención de las chicas, es muy guapo, extremadamente guapo.
Solo somos un par que le prestamos atención, esto es lo que pasa por estudiar en una universidad pagada donde cada uno tiene más dinero que el otro, que solo están acá para pasar el rato pues una fortuna los espera el día que uno de sus padres dejen el mundo.
Al profesor tampoco le importa mucho si aprenden pues de igual manera gana extremadamente bien.
Una suma muy grande de dinero que sí yo ganará eso no me importaría tampoco estar como un idiota hablando y hablando cuando la gran mayoría está entretenido en cosas más importantes.
Él cumple su trabajo enseñando y sí que lo hace bien.
Sacudo mi cabeza cuando me empiezo a concentrar en los movimientos sensuales de sus labios más que en sus palabras.
Tengo que aprender.
Tengo que dejar de ver la entrepierna del profesor.
Tengo que escuchar.
No tengo que ver sus pectorales ajustados en su camisa.
Me remuevo un poco del asiento pues mi culo aún me duele un poco, el celular de última tecnología que me obligo a tener Yami sigue vibrando en mi bolsillo pero lo ignoro, en esto momento me lamento de haber recibido su regalo luego de horas de entablar una discusión sin fin, una discusión que termino con él como vencedor luego de que hiciera que pierda el control de mi cuerpo y de mis palabras con las lentas caricias que otorgaba con sus manos expertas en mi cuerpo.
Eso es hacer trampa, ha usado su sensualidad como arma para que pierda el control.
Hoy se supone que nos veríamos nuevamente para ir al cine a ver la película de Barbie y luego pasarla bien en su departamento pero un trabajo de último minuto le salió así que actualmente debe estar preparando su instrumento de trabajo para que quede erecto y poder enterrarse en otro de sus colegas... La estará pasando genial, por lo cual no entiendo porque me sigue llamando.
Sacudo mi cabeza volviendo a concentrarme en el profesor que sigue llevando en sus manos el bulto... Perdón busto en miniatura de un cuerpo humano, señalando las partes indicadas donde debemos poner la aguja.
El sol que ingresa por la ventana hace que se vea muy bien, es muy sensual he de reconocerlo, cada movimiento que hace con su cuerpo bien ejercitado es muy maravilloso pero no se compara con el cuerpo del hombre que sigue llamándome.
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Solo Una Noche (DekuKatsu)
Random¿Quién diría que todo cambiaría en una sola noche? Era solamente una noche de sexo, nada más, nunca se me cruzo por la cabeza que le gustase. Era mi cumpleaños número 18 y quería descontrolarme por un solo día así que entre a aquella discoteca que s...