Viernes 27 de Diciembre

45 5 0
                                    

Me desperté de un golpe la sensación de que llegaba tarde a la reunión de las 9 me invadió el cuerpo.

Estiré el brazo para mirar la hora en mi movil
Las 8:30, LAS 8:30
De un salto salí de las sabanas. Bear seguía ahí dormido, tranquilo, relajado... No quise despertarlo, cuando sintió que lo observaba desde el marco de la puerta escondió su cabeza en mi almohada.

Que mono

Después de desperdiciar dos minutos de mi preciada mañana mirando a Bear me fui corriendo para el baño.

Me duché, me arreglé un poco la cara y me vestí en tiempo record solo tarde 20 minutos, pero aun me quedaba lo más difícil : tener que ir a la oficina que se encuentra en el centro, que no haya atasco que a esta hora siempre hay, aparcar en el centro...

Paré de pensar en cuanto una voz un ronca me despistó.


—¿A dónde vas? —dijo un Bear bastante tranquilo desde la cama a una Darcy bastante agitada que no encuentra las llaves de su nuevo coche


— Tengo que estar en el centro en diez minutos la reunión empieza a las 9 —el me miraba con extraño


—Pero Dar...

—¡No! Ahora no Bee— le corté— se que me vas a decir que lo de anoche fue increíble... ¡Has visto mis putas llaves del coche!


Me quería morir ¡ughhhh!


—Darcy son las 7:55 de la mañana por que tienes tanta prisa


—¿Las 7:55? No no son las... — saqué mi teléfono para confirmarlo y si eran las 7:55 de la mañana — las 7:55...


Seré estúpida que ya no veo bien ni la pantalla del teléfono

Por una parte me relaje un montón ya no tenía que salir corriendo.

Automáticamente mis hombros se relajaron.

Bear empezó a reírse desmesuradamente, yo fruncí el ceño, el desde la cama me hizo el ademán de que me sentara en el, y así hice me senté en su regazo.


—Ya no se ni leer la hora


El se seguía riendo


—Ya  Bee no hace tanta gracia — al ver que mi cara no tenía nada de emoción paró de reírse


— Por que me miras tanto. — al dejar de reírse, centró toda su atención en mis ojos tanto que intimidaba


— Solo estaba apreciando lo perfecta que es mi novia la cual no sabe leer la hora — puse los ojos en blanco


—Eso no tiene lógica porque si fuera perfecta sabría ver bien la hora en mi teléfono.


— Te amo — dijo esta vez mirando mis labios


— Ay Bee que cursi eres a veces — el soltó una pequeña pero muy pequeña sonrisa porque seguía concentrado en mis labios

El diario de Darcy Tomlison Styles Donde viven las historias. Descúbrelo ahora