Inefable Libro uno (concluida)

20. Las aventuras en el amor con Flynn Baker.

Lili es... es la chica más perfecta que jamás conoceré, nunca pensé que podría enamorarme de alguien y mi yo de hacía un año le daría un shock anafiláctico al ver lo cursi que aquella chica me había vuelto.

Si, antes era alérgico a lo cursi y seguía siéndolo cuando Lili no estaba conmigo.

Sinceramente nunca creí en el amor, con todas las chicas que me besaba, no sentía nada, a ver que no me he besado con muchas, tampoco es que fuera el príncipe azul de cenicienta buscando a la chica con la que podría enamorarme como él con su zapato, ni siquiera he tenido nunca una novia como tal.

Pero si soñaba con encontrar a esa chica que me hiciera sentir que era importante para alguien, porque desde pequeño he pensado que no puedo importarle suficientemente a alguien, contando la mierda de relación que acabaron teniendo mis padres, le pillé manía a eso de enamorarse por si me pasaba lo mismo que a ellos.

Pero cuando Lili apareció en mi vida, joder, creo que sentí tantas emociones que ni conocía, que podría escribir, sin tener ni idea, un libro.

Ella era mi calma, mi seguridad y toda la felicidad que llevaba tanto tiempo buscando que, si no fuese por ella, empecé a sospechar que nunca aparecería.

<<Exagerado.>>

Y no me escondo.

Me acuerdo de verla siempre llegar una hora antes al instituto, mientras yo esperaba fuera fumando con Jake, la veía tan perfecta, tan conocida, era como si ya la hubiese visto antes, incluso un día llegué a pensar que no era real, siempre llevaba un libro en la mano, el que más leía era Orgullo y Prejuicio, según lo que encontré en internet es un clásico de la literatura Inglesa, lo compré en una librería a tomar por culo de mi ciudad, para que veáis lo que he tenido que hacer para que me notase.

Me lo leí en dos días para poder tener un tema de conversación con ella, pista, no me atreví a acercarme para poder hablarle y se tiró unas dos semanas sin aparecer por clase.

Normalmente estaba tan concentrada en su mundo de la literatura que un día se chocó con una puerta y miró por todos lados para asegurarse de que nadie le había visto, fui el único que la vio, si algún imbécil se hubiera burlado ahora estaría sepultado bajo tierra.

Si, lo admito, me daba miedo empezar a hablarle y que le pareciese un imbécil, joder todos los tíos haciéndose los chulos diciendo que no le tienen miedo a hablar con la chica que les gusta.

Pista número dos, si tienen, es normal tener miedo.

El primer día que le hablé fue el mejor día de mi vida, sin exagerar.

Obviamente me había sentado a propósito a su lado, y cuando notaba que se me quedaba mirando de vez en cuando la comisura de mis labios se elevaba, le pedí un bolígrafo, teniendo un estuche entero de ellos que le había robado a Jake infinidad de veces, y me dio uno de tinta negra, pegaba con mi personalidad y vestimenta, para que mentir.

Al día siguiente la pude ver otra vez después de pelearme con un imbécil que se burló de ella en la entrada, si vuelve a llamarle rarita, no sale vivo del centro.

No sabía que estaba en esa aula, por lo que cuando la vi un miedo que nunca había sentido se apoderó de mi cuerpo, solo pensaba en que, si le generaba rechazo verme en ese estado, mis oportunidades se acabarían, pero Lili no era así, me arrastró sin importarle nada a su pupitre para curarme, estuve sacándole información como pude, no es una de mis grandes cualidades y cuando tuve que mentirle sobre una optativa de literatura pensaba que me pillaría, pero no, todo salió a la perfección.

Lili desde entonces ha sido mi mejor amiga, la chica que me gusta, y posiblemente el amor de mi vida, me enseñó que tengo que dejar de pensar en lo que pudiera pasar y centrarme en lo que estaba pasando, en el presente, porque vivir mi vida a su lado era una completa locura, pero una locura que me encantaba vivir.