Un recopilado de aquéllos vehículos usados antes, durante y después del primer conflicto de escala mundial, de igual modo una explicación a aquellos vehículos opacados por otros más reconocibles.
En mayo de 1917, el diseñador de tanques alemán Joseph Vollmer, se interesó en desarrollar un tanque ligero, ya que estaba desilusionado con los diseños de tanques lentos, engorrosos y pesados. Debía construirse rápidamente, y la mejor manera de hacerlo era utilizar motores, transmisiones y otras piezas mecánicas existentes.
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Joseph Vollmer presentó una propuesta de tanque ligero al Mando Supremo Alemán. En marzo de 1918, el primer chasis de tanque ligero con orugas, con un motor y una transmisión en funcionamiento, estaba listo para las pruebas. Se trataba de un tanque de caballería que media 2.5 metros del alto, 5.1 metros de largo, 1.9 de ancho y un peso de 6.9 toneladas. Teniendo un blindaje de entré 8 a 14 milímetros y armado con una ametralladora Maxim.
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Los resultados de la prueba fueron decepcionantes, ya que la velocidad máxima obtenida fue de solo 18 kilómetros por hora. El 7 de abril de 1918, cuando la superestructura blindada y la torreta se atornillaron al chasis, esta velocidad máxima se redujo a 16 kilómetros por hora.
Leichter Kampfwagen 2
Joseph Vollmer había estado trabajando en un segundo diseño que se convertiría en el Leichter Kampfwagen II (LK II). El nuevo diseño del tanque tenía un blindaje más grueso que el del LK I, lo que lo hacía más pesado.
En junio de 1918, Joseph Vollmer terminó su segunda versión del LK II. El 17 de julio de 1918, tras nuevas reuniones, se realizó un pedido inicial de 670 tanques LK II, con la opción de aumentarlo a 2000 tanques para el 30 de junio de 1919 y otros 2000 para terminar en diciembre de 1919, con lo que el total asciende a 4000. La primera producción LK II salió de la línea de producción el 10 de octubre de 1918, el pedido se canceló al mes siguiente cuando terminó la guerra .
El chasis del tanque estaba remachado. La superestructura estaba atornillada a un marco de metal. La placa blindada del radiador delantero tenía un grosor de 14 milímetros y estaba inclinada. Tenía bisagras para permitir el acceso al compartimiento del motor para el mantenimiento. Los cerrojos que mantenían la placa blindada en su lugar tenían puntas cónicas para protegerlos de daños, el blindaje delantero, lateral y trasero tenía un grosor de entre 12 milímetros y 14 milímetros. El blindaje en la parte superior de la superestructura y la torreta tenía un grosor de 8 milímetros. La armadura del vientre tenía solo 3 milímetros de espesor.
