Hoy era mi aniversario con Ronny, había pasado un año desde aquella mañana frente al mar que me pidio ser su novia, ese chico se había ganado mi corazón, lo amaba tanto, era un sentimiento nuevo que nunca había sentido con alguien más.
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- ¿A dónde vamos? - dije en el auto.
- Shhh, ya lo sabrás - íbamos camino al aeropuerto, Ronny solo había dicho que que alistará maletas, que saldríamos.
- ¿Sabes? Hace un tiempo una chica rubia se acercó a mi y dijo unas palabras extrañas "El es el correcto" o algo asi, no estoy segura.
- ¿Y quién era? - pregunto
- No lo se... Era una chica muy bonita, pero nunca la volví a ver, tiempo después la busque en el café pero no sabían nada - termine de decir para recargar mi cabeza en el vidrio del auto.
- Bueno... Pero ves, tenía razón, yo era el indicado - nos vimos unos segundos, no pude evitar darle un beso.
Después de unos 15 minutos llegamos al aeropuerto, por el auto Juan después iría por el.
Nos sentamos en una de las bancas a esperar, ronny fue al baño y me había dejado una nota.
Abrí la nota que decía "Linda, vamos a dónde todo empezó" en ese momento mi cerebro máquino que iríamos a España.
Regreso ronny, era hora de abordar el avión.
Una vez dentro de este, buscamos nuestro asientos, por casualidad de la vida nos tocó justo el mismo número de asiento que nos tocó el primer vuelo que compartimos.
- Te quiero llevar a dónde inicio todo esto - dijo el y dejo un beso en mi frente.
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- Te gustaría ir a... - hizo una pausa pensando - ¿Solo recorrer la ciudad? -
- Claro, no hay algo más que me gustaría que pasar tiempo con el amor de mi vida - tome sus mejillas e hicimos contacto visual.
- Te amo, mi amor...
Salimos del hotel en el que nos hospedamos, solo caminamos por Madrid, mientras hablábamos de la vida no había nada mejor que solo hablar y disfrutar.
Caminamos al rededor de 25 minutos.
- ¿Sabes? Cuando te conocí pensé que eras guapo, pero yo no iba a estar con un malandrito... - ambos reímos.
- "Ayy yo nunca andaría con un malandrito" - dijo mientras "imitaba" mi voz, de nuevo reímos.
- claro, siempre hay una primera vez para andar con un malandrito - di un ligero apretón a su mano
- Mjum, y ¿Te gusta estar con esté malandrito" - nos detuvimos.
- Me encanta - me abrazo después de unos cortos segundo lo abraze también.
- Yo creo que es hora de regresar - susurro en mi oído.
- Bien bien -
Cuando regresamos al departamento me dijo que mañana me tenía una sorpresa, algo que a mí me emocionaba.
