TU CASA

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Isa esta en casa con su mamá y su hermana Lourdes, su madre está muy molesta con ella y la ofende, la maldice. Pero su papá escucha las ofensas, los gritos y se acerca a defenderla e inicia una discusión entre sus padres, Isa se siente culpable y triste. 

Se va a su habitación y detrás de su cama tiene plantas que cuida a escondidas, es una monstera y varios teléfonos, las riega y en ese momento le pide a su hermana Lourdes cerrara la llave de la manguera porque se tiraba el agua de las macetas.

Después ve a Roberto en el negocio de casas, pero era de noche y estaba muy oscuro, aparte había mucha lluvia y lodo, el agua corría por arroyos por las calles, después por algún hecho raro como suele suceder en los sueños Isa y su familia habían perdido su casa, pero Roberto se sentía comprometido en darles una y los llevaba al negocio para que vieran la que tenía de muestra para dársela, Isa no quería aceptarla, pero su madre la obligaba a ir a verla y recibirla.

La entrada de la casa es muy bonita, es una casa de madera con techo en dos aguas y con una pequeña terraza como recibidor, en un mueble de madera habían colocado figuras de cerámica, ella vio un oso blanco, un perro pequeño que tenía rota una orejita, ella sonreía al ver los detalles tan lindos y le preguntó a Roberto si él había elegido esas figuras y le respondió que sí, que todas eran pensando en ella y para ella, porque sabía que amaba la naturaleza y los animales, mientras caminaba vio un canasto de yeso con fruta muy hermoso pintado, había otro oso blanco de pie y alzando sus patas, entonces ella le pregunto porque el perrito tenía la orejita rota, y él le dijo que se cayó entre el oso y el canasto de frutas porque quería verla llegar a su casa, que lloraba de tristeza por verla y porque la extrañaba mucho y por eso cayó rompiéndose su oreja. Isa se reía y sonrojaba con su historia.

Isa continuó caminando y vio la puerta principal en color blanco, decorada con ramos de flores muy hermosas, abrió esa puerta y vio la sala que estaba amueblada, la cocina era muy hermosa también, escuchó un ruido y era su madre que entraba y se sentaba en el comedor que es redondo y se dirigía a Roberto confirmándole que aceptaban la casa, Isa veía a Roberto avergonzada e insatisfecha porque ella no quería nada regalado.

Cuando salieron de la casa había mucha gente haciendo fila para ver la casa muestra, Roberto le preguntaba a Isa si le gustaba su casa y que si había algo mal ubicado. Ella le respondía que si le gustaba mucho, solo que la altura del techo era muy pequeña y en la entrada había una lámpara alargada que no debía estar allí porque el techo era muy bajo y por poco se picaba sus ojos, él sorprendido le preguntaba...- ¿En serio? Vamos a ver, acompáñame.

Caminaron por la entrada e Isa veía a la gente formada que empezaban a entrar por familia a la casa y a todos les gustaba muchísimo.

Roberto le llamó a un trabajador y le pidió que retirara la lámpara y pusiera una pegada al techo porque Isabel estuvo a punto de lastimarse.

De pronto Isa se encuentra en la calle entre la lluvia y ya hay mucho lodo en la calle, ella buscaba una pala para hacer a un lado el lodo y que toda la gente pudiera pasar, encontraba una ancha y empezaba a retirar el lodo de las banquetas, ella miraba a lo lejos a Roberto que ya estaba llevando su casa a un terreno, justo enseguida de su negocio, la casa era color vino o guinda, ella se imaginaba que la ponía en ese terreno para que ella cuidara su negocio, pero después notaba que estaba bardeado el terreno.

Un señor se acercó a ella para ayudarla a retirar el lodo.

De pronto Isa esta trabajando en una empresa muy grande en el área de limpieza y veía al señor que le había ayudado a limpiar el lodo de la calle, él se acercó a saludarla cuando la reconoció, le preguntó si también trabaja allí, y ella le respondía que sí, que tenía poco que había llegado. Caminaron juntos y se separaron, después se volvían a encontrar y se volvieron a saludar, él le preguntó donde vivía ella, Isa le dijo que en Rosarito y le preguntaba dónde vivía él, mientras sonreía le decía que también él.

Es un hombre mucho mayor que Isa, en ese momento que platicaban llegó un hombre joven, muy atractivo y quería ayudarla a cargar algo que Isa traía en sus manos, Isa le decía que no necesitaba ayuda, pero el joven tocaba sus manos y le quitaba lo que ella traía, el señor se les quedó viendo y se retiró en silencio, Isa lo vio manejar un pick up viejito en color azul claro y por alguna razón Isa se quedaba preocupada que el señor pensara mal de ella por haber dejado que el joven la tocara de las manos.

Al siguiente día se volvieron a encontrar en un pasillo y se saludaron, aunque el señor se veía diferente, muy distante, Isa caminó por el piso mojado que tenía jabón y se resbaló, antes de caer al piso el señor la sujetó y la jaló acercándola a él, ella se sujetó de sus brazos y le sorprendió sentir sus músculos fuertes a pesar de su edad mientras estaban abrazados, ella lo elogió por su reacción rápida y por sus músculos a pesar de su edad y rápido se disculpó porque no quería decirle que era muy mayor, pero mientras quería disculparse seguía llamándole mayor.

Salió una secretaria y los mandaron juntos a una casa, no sabía a que, pero al llegar a la casa ella la reconoció, es donde Isa creció, todos sus recuerdos de momentos vividos en esa casa llegaron a su mente como en su sueño, su mamá tenía una perrita llamada Cleo y los vecinos le dijeron que los anteriores dueños la habían abandonado en la casa, Isa no podía y no quería creerlo, pero al verla sabía y sentía que era la de su mamá pero Isa era una niña y solo recordaba en la actualidad que era color cafecita de cabello chino, el señor la veía triste y muy pensativa y le preguntó que le ocurría, ella le platicaba que sentía que conocía a esa perrita y pensaba que era la de su mamá pero que no podía ser, porque habían pasado muchísimos años, el señor le dijo que quizás no podía ser, pero que esa perrita se le quedaba viendo muy anormal, que la saludara, y se despidiera de ella.

Isa se acercó y vio sus ojos que parecían de humano, de pronto se desaparecía e Isa se ponía a llorar, el señor se acercó a ella y la volvió a abrazar y trataba de calmarla.

Se retiraron del lugar y en el camino el señor comenzó hablar.

-Te voy a decir algo, me gustas mucho desde que te vi. ¿Yo te gusto a ti?

Isa le respondió que sí, que también le gustaba mucho.

Pero él se disculpaba, lo siento, de verdad lo siento mucho, entonces ella lo interrumpió para preguntarle.

- ¿Estás casado verdad?

Y él asintió con la cabeza afirmando.

Isa rápido le aclaró que entonces no podían ser nada y se bajó rápidamente del carro cuando llegaron de nuevo al trabajo.

Ya habían pasado días y no se habían visto, Isa estaba limpiando unos consultorios médicos de la empresa y lo vio llegar a uno que era para problemas sexuales conyugales, al verla él se sintió muy apenado y trataba de explicarle que no era su problema, ella le decía que no tenía que explicarle nada porque no era nada de ella y se marchaba para no hacerlo sentir más incómodo. Mientras se alejaba la alcanzó el hombre joven y platicaban, el señor los vio alejarse y se quedó molesto y aparentemente celoso.

El joven le habló de su amor por ella y le pedía fuera su novia, ella le dijo que no podía aceptar porque él no le gustaba, que a ella le gustaban los hombres maduros, que buscara a una joven como él y que no le volviera hablar de amor a ella si quería ser su amigo.

Al llegar Isa a su casa iba muy triste y le platicó a su hermana Lourdes el porque siempre tenía que vivir amores imposibles, y lloraba acostada en su cama. 

FIN

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⏰ Última actualización: Jul 28, 2023 ⏰

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