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— Me fui, por qué no quería ser parte de una mafia, dónde tarde o temprano me terminarán matando.

— Lo sé hijo, y por eso no te estoy pidiendo que te hagas cargo de esa mafia, yo quiero que cuides del trabajo familiar, de las agencias de modelaje, tú madre ya falleció, tú hermano ya tiene una familia y un negocio, el tampoco quiere saber de mí, tú eres el único que me queda, yo ya estoy muy viejo, pronto voy a morir.

— ¿Y que va a pasar con tú mafia? — me senté en la sillas que se encontraban al frente de ese escritorio.

— Lo voy a dar por terminado, dejare que los demás se hagan trizas solos. — me sonrió y suspiré.

— De acuerdo, pero antes de que acabe tú contrato de mafioso, quiero que hagas eso, por favor. — me puse de pié y mire a Jungkook, el cuál jugaba con un pesecito que se encontraba en una pecera, a un lado de la puerta. —... Ese pez se llama goldin, era mi pez dorado de cuando tenía nueve años.

— Es impresionante que aún siga vivo. — dijo jungkook, encantado con el pez, el cuál respondía de los golpecitos de jungkook al cristal de la pecera.

— Si, lo he cuidado muy bien, desde que yoongi se fue de la casa. — dijo mi padre, y ambos lo volteamos a ver.

— Bueno padre, nos tenemos que ir ya, que pronto saldrán mis otros amigos, y tenemos que ir por ellos. — dije mientras jungkook y yo le hacíamos una reverencia.

— De acuerdo, Yoongi, ¿Aún sigues viviendo en la misma casa? — pregunto con una sonrisa.

— No, ahora vivo con NamJoon, ¿Y tú como sabes dónde vivía?... Ah... Me estuviste cuidando... Me lo debí de imaginar. — negué con la cabeza y una sonrisa en mi rostro. Nos despedimos de mi padre, para después salir de su oficina.

...

Ya nos encontrábamos en dirección a la universidad, para ir por Namjoon, taehyung y seokjin, jungkook en todo el camino estuvo pensativo.

— Hyung... ¿Cómo es que a tus padres les pasó lo mismo que a hoseok y a ti? — me miro con curiosidad.

— Pues los padres de agust d, y Kim NamJoon, pues también les sucedió lo mismo que a hoseok y a mí, ellos dos se soñaban, y al último se unieron. — dije sin quitar mi mirada de la carretera.

— ¿Y como es que murieron? ¿Y tú como pudiste volver a reencarnar siendo hijos de ellos, y Namjoon no? — dijo sin quitar su mirada de mí.

— Pues cuando yo era Agust d, mi madre había muerto cuando yo tenía diecinueve, la emperatriz de ese tiempo se llama mingao, era esposa de mi padre el rey min Yoonsu, mi madre fue la concubina del Rey, pues mi madre, tuvo un amorío con mi padre, y pues la emperatriz al darse cuenta, la asesino, decapitandola... Y mi padre murió, por qué lo decapite yo.

— Válgame dios... Cuando tengas hijos, y te pidan que les cuentes una historia, está será una de las mejores. — dijo impresionado.

— Pues lo de Namjoon, no lo sé, pero siento que no debería de decirle a mi padre, y mucho menos a Namjoon, por qué siento que estamos moviendo la línea del tiempo. — dije sin sentido alguno, solo para terminar está conversación que me provocaba Dolor de cabeza.

[...]
Un mes después.
[Hoseok.]

Ya pasó un mes desde que me volví novio de leekyung, todo a sido espantoso, me golpea, me grita, me toca, simplemente es algo que no estoy soportando más.

Quiero dejarlo, pero si lo hago, el va a lastimar a mis chicos, y eso no quiero, pero por otro lado, me encuentro feliz, por qué Yoongi ya no se ve tan mal, recupero su peso, su color de piel natural, el rojizo de sus labios.

Ahora su cabello es rubio, y corto. -(hablamos de agust d, del MV agust d ;3.)- al parecer Yoongi a vuelto al modelaje.

Los chicos ya no se me acercan a hablarme, por qué se enteraron que leekyung no me deja, bueno, que según yo, ya no quería tener contacto con ellos, y que no quería que leekyung se juntara con ellos.

Lo que más me dolió, es que ellos creyeron eso, y por eso ya no me hablan. Ahora me encuentro aquí, en mi habitación, desnudo, sangrando de lugares sensibles, después de que leekyung me haya tocado a la fuerza.

— Vístete mi amor, que debemos irnos a la universidad, mi pequeño muñequito. — dijo con una sonrisa, mientras se empezaba a vestir.—... ¿te gustó tu regalo de aniversario, de un mes?

— S-si... Me encantó. — dije con una sonrisa fingida, después de las dos semanas en las que me estuvo tocando, pude fingir mi dolor físico y mental, para hacerle creer a leekyung que estoy bien.

— Que bueno, mi vida. — se terminó de vestir y fue a mi baño, me puse con rapidez un cambio de ropa interior limpio, y me puse unos pantalones de vestir negros, unos converse altos de color negros, y una camisa azul fuerte y una sudadera morada fuerte, me puse una cadena de plata, y peine mi cabello, me mire en el espejo y note como mi rostro estaba cada vez más demacrado por los golpes.

Los moretones parecían permanentes, como sí jamás se fueran a borrar, ahora en mi cuello tenía las manos de leekyung marcadas, y lo peor de esto, es que leekyung, no me dejaba cubrirlos.

...

Ya nos encontrábamos en la universidad, las clases ya habían pasado, como de costumbre, y yo estaba en la cafetería, haciendo mi tarea de biología.

— ¡Feliz aniversario, mi amor! — dijo leekyung a mis espaldas, cuándo me gire, pude ver qué en sus manos traía un ramo de flores mucho más grande que el, toda la cafetería tenía su atención puesta en nosotros.

No pude evitar sentirme feliz y halagado por semejante regalo, me puse de pie con timidez y leekyung puso las flores en la mesa del comedor.

— Feliz aniversario de un mes mi muñequito, bello. — me sonrió y me abrazo, plantando un beso en mis labios, solo correspondí su beso y su abrazo.

...

 𝐌𝐈 𝐒𝐄𝐗𝐘 𝐏𝐎𝐒𝐄𝐒𝐈𝐎́𝐍 {-SOPE-} (*Reescribiendo*)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora