Ella

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Ella estaba perdidamente enamorada, sólo él existía, el era todo lo que ella necesitaba. No le importaba pelearse con todos para estar con él, le costaba muchísimo entender que el tenía novia, que él no le iba a dar importancia, aunque ella no quería entender eso le insistía para que esten juntos, el no sabía que ella estaba tan enamorada de él.
¿Quién se puede enamorar de alguien que nunca vio? ¿Quién le iba a creer que en verdad estaba enamorada? ¿Quién iba a pensar que ella lo quería en serio? NADIE, sólo él. Digo sólo el porqué ambos eran iguales, auque ella más "cursi", se entendían, pensaban casi siempre lo mismo.
Ella sabía que el era el indicado, pero...¿Cómo ella sabía que el era el indicado si nunca lo había visto? Lo sabía porque era a el al único que amaba, era él el que la entendía. A todo esto ella nunca se había preguntado que sentía él por ella, sabía que la quería pero no sabía si estaba también enamorado o no.
Después de un tiempo de tanto insistir el definitivamente la dejo a su novia, ella felíz, sentía que era su momento para confesarle su amor, pero...¿Por que no lo hizo?¿Tenía miedo a ser rechazada por el? ¿No quería que su amistad termine? Ella no se lo dijo porque tenía miedo que su amistad se acabe para siempre, y no le volvería a escribir, se iba a quedar sin él e iba a ser peor que nada. Así fue, ella no se animo y siguieron como amigos un largo largo tiempo, pero ya no eran los mismos de antes, pasaba algo y ninguno admitía nada.
Una noche de agosto ella se planteo a si misma que debería decirle que estaba enamorada de él que ya no importaba si se arruinaba su amistad, ella quería que el lo sepa y nada más. En su cabeza se le cruzaron miles de hipótesis pero no le importo, esa noche se lo dijo. No fue la mejor respuesta, en realidad la respuesta que ella esperaba, pero no vamos al caso, su amistad siguió un poco rara pero siguió. A las dos semanas de que ella le dijo eso, él le dijo que estaba enamorado de ella. Fue la mujer más felíz del mundo en ese momento, no lo podía creer. Al fin después de tanto tiempo resulto, se sintió orgullosa de ella misma, después de tanto remarla consiguió lo que más quería.
Pasaron los meses y ambos estaban enamorados, cada vez más enamorados. A todo esto... vivían lejos, vivían a ochocientos kilómetros, y también ella tenía catorce y el veinte años . Pero ni eso los freno para estar juntos, se amaban como nadie en el mundo, eran, son y serán únicos, ellos y su eterno amor. Nunca vi a dos personas superar sus problemas tan bien, eran tan unidos. En verdad se amaban.
Cuándo se vieron por primera vez, cuándo el viajó para verla, ella sintió que no tenía final lo que pasaba entre ellos. Fueron los mejores cinco días más felices de su vida, el dos de abril paso algo que jamás olvidarán ninguno de los dos, ella más que nada. Sintió algo que nunca había sentido. Estaba realmente con un hombre, con el amor de su vida. Nadie la hizo sentir así más que él, nadie la había tocado así, sólo él. Nunca sintió éso.Estuvieron tantas veces juntos estando lejos y estaba vez estában más juntos que nunca. Eso fue lo que la termino de enamorar. Ella sabía que el era, el iba a ser el amor de su vida, nadie más que el.
Cuándo esos tan perfectos cinco días se acabaron ella se sentía vacía, hasta el día de hoy se siente así. Claro, ¿cómo no sentirse así sin su amor? Lo extraña cada segundo, no hay día en el que no piense en él, no hay noche en la que no llore porque lo extraña , lo único que la calma un poco es saber que lo va a volver a ver.
El amor de esos dos adolescentes supera todas las cosas, estan profundamente enamorados, dispuestos a pelear por estar juntos, superar cada uno de sus problemas, no les importa nada más que ellos. Se aman, de verdad que se aman, son admirables.

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⏰ Última actualización: Jun 08, 2015 ⏰

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