Efímero | Kokonoi x Tn | Bonten | Tokyo Revengers

Capitulo 1

Ella estaba sentada en su habitación en silencio mientras leia un libro a escondidas, fue lo unico que pudo llevarse de casa de sus padres antes de que estos mismos la vendieran a la mafia. No se le permitía hacer ruido, hablar o hacer absolutamente nada a menos que le fuera ordenado tampoco podia leer ni ver la televisión, tenia prohibido el uso de cualquier dispositivo, ella estaba completamente aislada, nisiquiera podia salir de esa habitación a menos que le fuera ordenado. Mientras estaba sumergida en su lectura unos pasos la pusieron en alerta haciendo que escondiera el libro bajo su almohada y corriera rápidamente a arrodillarse frente a la puerta.
-Tn, baja al salon y quedate sentada en el sofa.- La orden del tipo que acababa de entrar era clara y concisa, ella bajaría y se sentaría en el sofa sin hacer ruido, sin hablar y sin mirar a nada ni a nadie.
- Si señor Akashi.- Con la mirada clavada en el piso se levanto y siguió al hombre que la había comprado. Akashi Takeomi.
Las risas y conversaciones le hicieron saber que habia visitas y que tenia que ser sumamente cuidadosa con cada mínimo movimiento. Al llegar al salón que se quedo en silencio ante su presencia, ella hizo una reverencia en silencio y se sentó como le habian ordenado.
- Quien es ella?- La voz de una mujer rompió el silencio que se había formado.- No parece japonesa.
-Hey Takeomi, no nos presentas?- La voz de otro hombre llamo al señor de la casa.
-Mmm? Vamos presentate.- Pateo sus piernas provocando un inmenso dolor pero ningún gesto de parte de la chica que no se movió un milímetro. Takeomi volvio a patear a la chica con mas fuerza y esta vez se puso en pie rápidamente y se presentó con la voz mas amable que pudo poner.
- Soy Ochoa Tn. Un gusto en conocerlos.- Hizo nuevamente una reverencia aun mirando el piso pero una mano la tomo bruscamente del rostro haciendo que mirara hacia la persona que la sostenía.
-Mira bonita, te presento a mi hermano Sanzu y a su acompañante.- Giro su rostro con brusquedad para que mirara a los invitados un chico alto de cabello rosado y ojos azules con pestañas pobladas y rizadas y a una chica de cabello negro largo delgada con caderas anchas y busto mediano.- Y los de allá.- Torcio aun mas su cuello para que pueda ver a dos chicos mas ambos altos con el cabello negro y morado.- Son los hermanos Haitani. Vamos saluda con propiedad "bonita".- Dijo lo ultimo en español burlandose de ella.
- Un gusto en conocerlos.- Sonrió como pudo ya que aun era sostenida con fuerza por Takeomi.
-Agh no sirves ni para esto.- La tiro al piso con fuerza provocando que el sonido de su golpe sonara por todo el salón.- Siéntate bien.- Le tiro nuevamente una patada y ella en silencio se alzo y se sento en el sofa sin mirar a nadie.
- Esa es la chica que compraste hace seis años?- Pregunto Haitani Ran, el mayor de los hermanos Haitani.- Se ve muy joven, cuantos años tiene?- Se acerco a la chica y tomo su rostro para examinarlo, ella lo vio y no puedo evitar pensar que era atractivo. Los ojos marrones de Tn se encontraron con los violetas de Ran que la miraban indiferentes.
- Contesta.- Una nueva patada de Takeomi la hizo reaccionar y desviar la mirada.
- V- veintiuno señor.
- Prácticamente la criaste tu desde que tiene quince.- La voz y risa de Sanzu le dieron un escalofrío a la chica.
- Algo asi.- Takeomi se rio del comentario de su hermano.
-Y no sabe hacer nada mas que estar sentada?- La voz de la mujer hizo que el corazon de la chica se saltara un latido por el terror, sabia lo que se le venia despues y sobre todo cuando todos se hayan ido.
- Vamos bonita, danos un poco de entretenimiento.- Odiaba cuando la llamaba "bonita" lo hacia solo para humillarla y hacerle recordar que jamas volvería a su pais natal y que él le habia prohibido hablar su idioma.
-Como desea que lo entretenga señor?- Dejo de lado todo sus pensamientos y se enfocó en la orden que le acababan de dar.
- No se, haz algo.- Le resto importancia con un movimento de la mano.
- Desea que cante tal vez? O prefiere que bai...- Un fuerte jalon de cabello la hizo callar de inmediato.
- Ahg Dios eres una puta inutil. Mejor lárgate.- Takeomi la tiro con fuerza nuevamente al piso a lo que ella se levanto y sin hacer mucho ruido y sin mirar a nadie camino hacia las escaleras en silencio.- Un dia de estos la dejare en tu burdel Haitani ya me esta aburriendo o sino la terminare matando.- Ella subía lentamente los escalones mientras sentia un fuerte dolor en el pecho.- Si sigues aqui en menos de 2 segundo te volveré a romper las piernas.- Dijo el hombre sin siquiera mirarla a lo que ella lo mas rapido que pudo subio las escaleras.- Ahora entiendo porque ni sus padres la querian...- Fue lo ultimo que escucho antes de cerrar muy suavemente su puerta y quedar en la oscuridad.
La habitación donde la tenia no era muy grande y tenia solo una cama con su mesita de noche y una lámpara y un pequeño armario, no habían ventanas pero contaba con un baño con ducha.
Ella saco su libro solo para volver a esconderlo pero esta vez encima del armario donde no se podia ver y se recostó en la cama cerrando sus ojos y recordando como era su vida antes de que sus padres se deshicieran de ella, recordó como se esforzaba para obtener siempre buenas calificaciones en la escuela y como tuvo que aprender a tocar piano y violin al mismo tiempo que canto y danza clásica, intento ser la hija perfecta pero a sus padres no les importo. Ellos solo veían por el bienestar de su primogénito y futuro heredero. Con estos pensamientos y una profunda tristeza se quedo dormida soñando que volvia a bailar en los campos de su tierra natal hasta que la puerta fue abierta de golpe haciendo que se despertara algo aturdida y saltara de la cama para arrodillarse en el piso pero una mano la detuvo jalando de su cabello.
Queria gritar, pero no lo hizo.
Abrió los ojos y vio a Takeomi quien la miraba con rabia y asco. Este le propinó un golpe que cayó en su pomulo y ojo provocando algunas lagrimas por el dolor y aun sin soltar su cabello la zarandeo de un lado a otro para luego tirarla al piso y patearla con fuerza y aun no contento con todo esto, se saco el cinturón y comezón a azotar a la pobre chica con él y en todo momento Tn se mantuvo en silencio, no se quejo en lo mas mínimo y no lloró.
Pero lo peor estaba por llegar.
- La próxima vez que te diga que me entretengas lo haces sin hablar y menos si hay visitas. No preguntes, tu solo toca el violín, el maldito piano, bailas o cantas, no me importa pero no me vuelvas a dirigir la palabra y mucho menos cuando hay gente presente. Entendiste?
- S-si señor Akashi.- Dijo comenzando a temblar.
- Ahora, quítate la ropa.- Lentamente y sin rechistar Tn se levantó del piso y comenzó a desnudarse, se habia quedado dormida con el vestido azul que traía puesto desde la tarde asi que fue rapida al momento de desnudarse frente a su dueño.- Muy bien bonita. Ahora en cuatro sobre la cama...
Ella obedeció pero dejo a su mente volver a su lugar seguro junto al recuerdo de aquella persona que ella amaba tanto. Sintió como de manera brusca Takeomi la penetraba con fuerza y enterraba sus dedos en las caderas de Tn, pero ella tenia prohibido hacer sonido alguno, no podia hacer tampoco ningún gesto y pensar en esa persona la ayudaba a mantener un gesto sereno aunque ya no recordaba bien como era su rostro y mucho menos su voz. Luego de un rato Takeomi araño su espalda y le dio un puñetazo.
- Acuéstate ya sabes como.- Tn gateo y se recostó sobre las almohadas boca arriba con las piernas abiertas para Takeomi quien la tomo del cuello cortándole un poco la respiración a lo que ella hizo un pequeño gesto que fue borrado por una cachetada. El hombre la follaba con demasiada fuerza, hasta que se canso se puso en pie volviendo a arrastrar a la chica por el cabello y la hizo arrodillarse.- Chupa.- Tn obedeció pero ya ni el recuerdo de su persona amada podia alejar su mente de este momento ya que Takeomi la obligaba a mirarlo mientras ella le hacia sexo oral y este al venirse la manchó toda obligando a la chica tragar el semen que caia en su boca. Takeomi se subió los pantalones y la empujó fuertemente con el pie para que esta cayera por completo al piso y le escupió en la cara para luego salir de la habitación cerrando la puerta. Ella se quedó tendida en el suelo y sin moverse hasta que escucho la puerta de la habitación de Takeomi cerrarse.
- Al menos esta vez no uso el cuchillo.- Penso mientras se ponía en pie para ir al baño a limpiarse, ella hubiera preferido un baño pero a esa hora ya no tenia permiso para tomar duchas asi que con una esponjita comenzo a limpiar su mancillado cuerpo, luego volvio a la habitación y mientras recogía su ropa y la doblaba escucho los pasos de Takeomi volver y ella se apresuro a arrodillarse frente a la puerta pero esta no se abrió solo se escucho un click y la voz de Takeomi.
- Mañana tienes prohibida la salida de tu habitación y esta puerta se abrirá únicamente para entregarte tus comidas.- Con eso ultimo se fue.
Ella termino de doblar su ropa se puso unas bragas y su pijama y se metio bajo las sabanas, sentia mucho dolor por todo el cuerpo y le costaba moverse, las sabanas que eran ligeras se sentían pesadas pero de algún modo pudo quedarse dormida.

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Segunda historia... Espero que esta termine mejor que la otra.
Si tienen alguna idea, sugerencia o corrección gustosa las leere
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