𝐎𝐍𝐄 𝐒𝐇𝐎𝐓𝐒 || 𝐂𝐀𝐋𝐋 𝐎𝐅 𝐃𝐔𝐓𝐘

𝟎𝟎𝟏

❝ 𝗦𝗶𝗺𝗼𝗻 "𝗚𝗵𝗼𝘀𝘁" 𝗥𝗶𝗹𝗲𝘆 ❞

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— De verdad, eres increíble... — soltó un suspiro tu teniente colocándose detrás de ti, apegando su gran pecho contra tu espalda mientras te ayudaba con sus manos con el arma que estabas sosteniendo.

Te encontrabas en la sala de entrenamiento con tu teniente, Ghost. Él además de ser tu superior, era también tu entrenador. Price te había avisado que de ahora en adelante él te ayudaría a prepararte para futuras misiones que posiblemente serían arriesgadas para el equipo y para ti.

Al principio te tomó de sorpresa cuando te había dado esa noticia y en cierta parte, sentías un poco de nervios ante la idea de imaginar de tener a Ghost como tu entrenador. De por si, era muy cruel contigo cuando iban a misiones juntos, siempre encontraba algún defecto o error en tu manera de actuar durante su presencia. Como olvidar cuando te regañó luego de una misión simplemente por no haberte cubierto bien atrás de un muro de pared provocando que te hirieran en el brazo derecho, no recuerdas muy bien que sucedió durante ese momento, porque todo se había vuelto algo borroso para ti, luego de aquella misión, y que te atendieran la herida de bala, él te regañó, pero fue de una manera algo más aterradora, tanto por su tono al hablarte como igual por su rostro. Jamás lo habías visto así y eso te hizo que un gran escalofrío recorriera por tu espalda, no entendías la razón de tal enojo, pero de verdad creías que él te odiaba o al menos eso era que pensabas.

Por eso mismo, te aterraba en cierto modo que él fuera tu entrenador, porque si él era así contigo durante las misiones, no querías imaginar como sería con sus entrenamientos y no te habias equivocado.

Todos sus ejercicios que te mandaba hacer eran lo peor, no eran difíciles de realizar, pero la duración de cada ejercicio era una eternidad, ni siquiera te daba algún tipo de descanso y si lo hacía era rara vez cuando veía que realmente estabas al punto de querer desmayarte.

Pero hoy fue un entrenamiento distinto, él te había mandado a realizar tiros en la sala de entrenamiento que tenían en la base, dentro del campo de tiro, pensabas que iba a ser más relajante debido a tu buena puntería con el arma, pero volvió con lo mismo, te estaba corrigiendo la postura y como estabas apuntando el arma. No podías entender bien si lo hacía apropósito o no, debido a que tú sabías bien que lo estabas haciendo correctamente, pero no te quedó de otra que obedecerlo, ser una buena recluta y no decir nada.