Lo recuerdo perfectamente fue una tarde del 2 de Julio el día estaba muy caluroso mis padres creían que lo mejor para mi seria alejarme de la ciudad así que iríamos a un bello y hogareño lugar llamado Woodenforest ya que creían que sería mejor que yo tuviera contacto con el alrededor y no estar rodeada de tantos edificios así que a la edad de 17 años nos mudamos y ahí fue donde comenzó todo...
-Papá ya llegamos?
-No querida aun faltan algunos kilómetros por recorrer aguarda las ancias que pronto llegaremos dijo el con una voz paciente
Asentí y seguí mirando a lo largo del camino todos los paisajes y maravillas que habían y que jamás había visto.
-Al fin llegamos dijo mi madre con una voz fuerte y firme
Todos bajamos del coche aliviados de la llegada tan esperada al pintoresco pueblo
-Baja tus cosas y conoce tu futura casa que aquí tal vez encuentres algo especial dijo mi madre con certeza.
-Entre a la nueva casa y mi futuro "hogar" recorri lentamente el camino que llevaba directo a la entrada ya que quería familiarizarme con todo aunque no era lo que esperaba ya que en mi imaginación viviríamos en un árbol y seriamos ermitaños y vegetarianos bueno creo que exagere un poco, bueno... tal vez mucho pero podría ser una posibilidad ya que nos cambiamos por lo "natural ". Seguí viendo el lugar hasta que decidí entrar a la casa y claro que se podría poner peor ya que mi cara se estrelló con el piso al no ver un escalón y no solo mi cara sufrió sino que las maletas cayeron sobre mí, y ahora no solo estaba aburrida sino con el cuerpo adolorido y la nariz rota, apenas empezando y ya voy mal.
Después de regresar del doctor continúe con la exploración de la casa con el primer intento fallido, así que me aventure por el segundo y espero que esta vez no me rompa nada.
-Y... ¿Cuál es mi habitación?
-Sube las escaleras y escoge el que quieras me contesto mi padre
-Subí y había dos cuartos vacíos y el otro en al que mis padres ya se habían instalado ¿Cuál podría elegir?
Abri la primera puerta y me encontré con un cuarto aburrido y sin chiste con una vista espectacular a la nada ya que no tenía ventana, instantáneamente cerré la puerta y abrí la del siguiente cuarto lo cual la puerta me llamo mucho la atención ya que tenía un pequeño árbol grabado en la esquina superior derecha ¿Qué querrá decir?
La verdad me importo muy poco, continúe mi camino hacia la inspección de mi cuarto, entre y mi primera impresión no fue tan mala como esperaba ya que era amplio y este si tenía una ventana.
-¿Qué te pareció la casa?
-Pues esta mmm... normal supongo
-¿Enserio, normal es lo único que se te pudo ocurrir?
-Sí, o que ¿Esta es una casa rara y anormal?
Mi padre no dijo nada simplemente dio la vuelta y con una actitud firme salió enojado dando grandes pasos representando su enojo hasta que salió de mi cuarto y cerró la puerta pero supongo que no me dijo nada ya que él piensa que mi actitud es normal en una adolescente esa siempre a sido mi excusa perfecta para evitar un regaño aunque creo que dentro de un año ya no va a funcionar. Como ya estaba extremadamente cansada salte sobre mi cama y dormí hasta que obscureció pero claro que no me iba a perder la cena, ya que tengo un amor pasional con la comida yo amo comer.
-Creo que estabas muy cansada dijo mi madre
-Y quien no con un viaje tan largo y aburrido
- ¿Te duele mucho tu nariz?
- Un poco pero puedo sobrellevarlo
-La próxima semana entras a clases
Sabía que mi padre se vengaría de alguna manera por el suceso de la tarde y que peor forma de hacerlo que diciendo que voy a entrar a clases.
-Gracias por recordármelo le dije sarcásticamente
Termine mi hermosa cita con la comida y me volví a dormir.
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Gracias al destino te encontre
Teen FictionEsta historia ocurre en la vida de una chica de 17 años llamada Elizabeth que ama la comida, tal vez pueda que su vida parezca aburrida y común y corriente pero lo que le espera no se lo imaginaba y todo fue gracias al destino...