Straordinario

Prólogo

Año 1980, Volterra, Italia.

Alessia Cullen y Ammar Blacke eran rodeados por los guerreros Volturi, mientras Aro y sus hermanos los miraban amenazantes.
La pareja se encontraba actualmente en la sede de los vampiros, ya que habían oído del embarazo de la vampiresa y el hombre lobo, esto les preocupó mucho pues tenían miedo de la criatura que podría llegar a aflorar de esa unión. Así que se reunieron y tomaron una decisión debían acabar con la amenaza antes de que está fuera existente.

- Alessia, querida. Sabes cuánto te apreciamos pero no podemos permitir que esa "criatura" _mencionó Aro con cierto tono despectivo mientras hacía una de sus caras._ nazca. Sería una amenaza para todos, incluso para los...hombres lobo.

- Nuestros hermanos y yo hemos tomado una decisión, matarla. _Dijo esto, a la vez que sonreía, mirando a la pobre mujer._

- No! No pueden hacer eso, no! _Dijo la mujer llorando_ Por favor Aro, por favor! _Suplico esta vez arrodillada, pero al vampiro parecía no importale el sufiremiento de esta._

-Alenjense! _Grito Ammar esta vez, el cual había permanecido callado, actuó inmediatamente defensivo cuando los Volturi se acercaron._

- Bien, suficiente! _Grito enojado Marcus_ Les daremos tres lunas para que cumplan con este mandato, concurrido este tiempo los visitaremos y si no está hecho, los mataremos a los tres. _Termino por decir Marcus sintiendo las miradas pesadas de sus hermanos, pero no les hizo caso._

_Gracias! Graciass!! _Sonrio con lagrimas en los ojos_

...

Las lunas habían pasado y era momento que los Volturi visitarán a la pareja, pero esta no había cumplido con el mandato. ¿Como podrían? Matar a su propia hija...
La mujer había dado a luz a la bebé, y tal como temían los Volturi está no era normal, era una híbrida pero claro, ellos no lo sabían.
El hombre de repente sintió el horrible olor de sus invitados, así que le dijo rápidamente a su esposa.

- Cariño, es hora. Ve, corre al bosque y llévate a nuestra hija, protégela. Yo las alcanzaré luego. _Dijo acariciando la mejilla de su esposa, y dándole un beso se despidió de ella y de su bebé._

Los Volturi llegaron frente a la casa, donde Ammar los esperaba con una expresión que gritaba claramente "no hemos cumplido con el mandato".

- Y bien? Lo habéis hecho? _Pregunto Aro divertido, pero el ya sabía la respuesta_

- No y no lo haremos.

El hombre se sorprendió al sentir de repente como dos vampiros lo tenían sujeto de los brazos.
Mientras Aro iba acercándose amenazadoramente.

_ ¿Donde está? _Pregunto acercado su rostro al del hombre lobo._

- No te lo diré _Contesto este entre dientes_

_ Cierto, aunque no hace falta que me lo digas. ¡Encuentrala! _Ordeno a Félix_ Jane...

Ammar lucho para zafarse del agarre de los vampiros y proteger a su familia pero no pudo, el dolor que sentía era tan fuerte que no lo soporto, fue asesinado por Jane. Ahora Alessia corría lo más rápido que sus habilidades se lo permitían, pero Félix era rápido, así que aceleró con toda la fuerza que tenía perdiéndolo de vista tan solo un poco, cosa que aprovecho para dejar a la bebé, la cual dormia tranquilamente ajena a todo el caos que había a su alrededor, en un rincón oculto del bosque. Al estar ahí su olor no podía ser detectado por los vampiros, ya que al ser una bebé no era tan fuerte y podía mezclarse con el ambiente. La mujer siguió corriendo hasta que llegó a un acantilado, y de repente sintió un dolor inmenso en su pecho ¡Ammar!
Ammar había muerto, lo habían asesinado y ella tendría el mismo final, Felix la había encontrado, la llevo con Aro quién le había dado una oportunidad de librarse de la muerte si le decía donde estaba la bebé, pero ella no hablo y entonces el vampiro la asesinó.