La Dama

Un cuento

Muchos sabían que el Emperador es un hombre poderoso, alguien que dirige su país y se asegura que estén en paz, pero para los que están dentro del palacio es una realidad diferente

Que el Emperador tenga concubinas no es algo nuevo, siempre existía el riesgo de que no sobreviviera el heredero

Pero por el alcohol y el efecto de las drogas a las que consumía el Emperador mato a tres hijos recién nacidos y las concubinas que perdieron a sus hijos eran expulsadas o morían en el acto

Actualmente habían dos concubinas vivas, ambas de países caídos

Dalia, era una mujer hermosa de cabellos blancos como la nieve y ojos rojos como rubíes, en su tierra tenia un rango alto en la sociedad y era la mas codiciada entre todas, su belleza y su habilidad en hablar la volvieron alguien muy conocida.

Entonces llego la guerra o mas bien, un plan de conquista

El actual emperador queria expandir sus tierras y empezo una guerra, muchos murieron y las tierras fueron tomadas mientras las arrasaba

Mi pais natal, Hiban solo quedo en ruinas

Mis familiares fueron asesinados, nunca volví a ver a mis amigos y mi casa no es más que ruinas

Cuando estaba por ser asesinada, el lo detuvo y me miro con detenimiento

Entonces ordenó no lastimarte y que me llevarán con ellos

Así termine en el palacio imperial, volviéndose su concubina

Al principio fue un poco incómodo, era un lugar desconocido para mi y no fue fácil hablar con los sirvientes

Lo que si conseguí, es información
El como ha tenido concubinas antes y que ya no están

Debido a la guerra, él no ha pasadomucho tiempo por aquí

Mejor

Prefería no tener algún contacto con el, si que disfrutaré de mi estadía aqui

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Han pasado cinco meses

Los nobles de este reino ya conocen más de mí, sino fuera porque soy una concubina, muchos ya me habrían mandado una propuesta

También los sirvientes me están viendo con buenos ojos, según los rumores me ven como una dama de impecables modales y de gran honor

-Hoy volvió a recibir una invitación-

-Es de la señorita Kairo, al parecer quiere invitarla a su fiesta de té-

A un lado estaban otras sirvientas murmurando

- Ella es realmente hermosa-
- Con su bello cabello, parece un hada-
-Sus ojos son como unos hermosos rubíes-
-Si no fuera mujer saldría con ella-
-¿Hablas de ti o de ella?-
- No importa-

Algo que nunca cambia son los chismes, gracias a eso pude saber mucho

- Ya pensaré en dar una respuesta, ahora quisiera dar un pequeño paseo-

Ante mi voz, todas dirigen su atención

- Yo le traigo un chal, incluso si es cálido aún llega aire frío-

-Gracias, Marian-

Después de unos pequeños arreglos, nos dirigimos al jardín, las flores están cuidadas y sus pétalos están de buen aspecto

Si hay algo que debo dar crédito, es lo bien cuidado que es este lugar, el diseño del palacio, los jardines y hasta la vestimenta tiene sus detalles hermosos