Cereza de Hirst

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POV REGINLEIF

La pequeña estaba con un cóctel de emociones en su ser, tenía miedo por estar encadenada de brazos, sintió sorpresa porque todo paso tan rápido que no se lo cree, pero sobre todo siente vergüenza de estar sin su falda mostrando sus algo humadas bragas de pegaso, seguía permaneciendo quieta debido a estas emociones, pero de regojo veía como su Hermana Mayor alimentaba a Nostradamus con su leche materna, lo cual desconcertó a Reginleif y a la vez perturbo, se notaba que el Francés bebía a la fuerza su cara era una fusión de entre sonrojo y cansancio, sintió pena por el Humano, pero eso se esfumó al ver como poco a poco su miembro se volvía erecto y firme como por acto de magia, ella nunca había visto uno y sintió costillas en sus partes intimas que no podía tocas debido a las cadenas, solo veía asombrada mordiéndose los labios hasta que empezó a frotar sus piernas entre ellas para aliviar el calor que sentía cosa que fue mala idea



Reginleif: ah… —Soltó un leve gemido involuntario sonrojándose, pero al mismo tiempo llamando la atención de su hermana, quien sonrió de reojo y dejo de alimentar a Nostradamus para levantarse y dirigirse ante la absorta en sus pensamientos Reginleif —(demonios, ¿eso salió de mi boca? Qué vergüenza, no me gusta tocarme ahí por pudor, pero esta situación es muy … Caliente) —pensó inmersa sin notar a su hermana para al frente



Brunhilde: oh qué tierno— dijo con tono condescendiente mirando sonriente a su hermana la cual con miedo la observo— oh vamos hermanita no te asustes, se oyó muy lindo ese gemido tuyo —menciono con una sonrisa angelical y maternal para luego sentarse aún lado de ella y acariciarle gentilmente el rostro— y yo que creía que la recatara y pulcra Reginleif era toda una señorita— mencionó mientras cambiaba su caricia a sostenerle el rostro con firmes abriéndole la boca— pero resulta ser que si eras una calenturienta de closet —dijo maliciosamente mientras se le ponía su pecho hinchado en la boca





Reginleif: hmrfgrfmmfm —intentaba hablar, pero no podía por obvias razones, la valquiria evitaba a toda costa dar acceso a su boca, pero ya era muy cansado



Brunhilde: debes alimentarte hermanita y tendrá un cuerpo sensual y esbelto como el de tu hermana mayor— menciono burlona mientras bajaba su mano izquierda por las piernas de la séptima hermana hasta llegar a la zona húmeda de la menor— bueno si no quieres beber por las buenas —menciono maliciosa para luego presionar con sus dedos el clítoris por sobre las bragas de su hermana, provocando que gimiera abriendo la boca, lo que le permitió a Brunhilde meterle el pezón en la boca —ahora bebe hermanita —ordeno aún gentil, pero con menos paciencia a la menor quien por instinto mordió el pezón con fuerza para librarse provocándole un horrible dolor a su hermana quien se separó enojada —Pequeña malcriada tú te lo buscaste —declaro furiosa

POV HIRST

Ya era tarde esa noche o quizás temprano, el ambiente en la habitación no le permitía saber, pero aun así el lugar hervía de lujuria, Sasaki estaba debajo de Hirst sin tener contacto, la segunda hermana de las semidiosas nórdicas volvió a besarlo y esta vez movía sus caderas sobre él, rozando sus partes intimas y el sonrojo del hombre apenas comenzaba a aparecer, Hirst se acostó sobre él sin detener su movimiento de roce de caderas, él intentaba relajarse temía a lo que haría Hirst, pero al mismo tiempo le excitaba, el beso era salvaje, pero sobre todo apasionado este mismo duro 4 minutos que para Sasaki fueron una eternidad hasta que la de pelo púrpura separo sus labios para el alivio del asiático quien casi se queda sin aire, pero cuando pensó que ella se detendría no fue así, ella se detuvo a mirarlo sin decir nada, precisamente a su varonil miembro al cual lo tenía en la mira desde hace un rato, su mirada denotaba deseos mundanos



Sasaki: creo que ya fue suficiente … Me arrepiento de esto … Olvidémonos de esto y … —menciono nervioso, pero fue callado por el beso con lengua de la bipolar quien luego empezó a darle chupetones en el cuello provocando los gemidos de Sasaki —ah… ah —sus gemidos eran roncos y bajos, pero eran lo suficientemente audible para el disfrute de Hirst, bajo entre besos hasta llegar a la masculinidad del Viejo Espadachín en donde sabía bien que hacer, su hermana Brunhilde le había enseñado todo de sexo unos milenios atrás, pero hoy era la noche, lo tomo en sus delicadas, pero firmes manos y comenzó besando el glande para después sacar su lengua para probar el líquido pre seminal en la punta



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⏰ Última actualización: Aug 04, 2023 ⏰

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Lazos inocentes  (Okita x Geir)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora