El señor de los anillos: El hermano de Aragorn

1 Garaldriel

Al despedirse de los de la comunidad del anillo Galaldriel sentía algo en su interior, como una pieza faltante en todo esto, decidió creer que solo era su preocupación por lo que se fue a su cama para recostarse un rato.

Galaldriel se encontraba en el bosque, al voltear a ver el amanecer este era diferente una luz blanca tapada por una sombra negra, la sombra parecía querer imponerse sobre la luz pero está prevalecía, de repente escucho un ruido, volteo la mirada al bosque sobresaltada, entre los árboles una figura joven se asomaba, tenía su espada desenbainada y caminaba con cautela, luego alguien familiar aparecia, era Legolas, se acercaba a aquel joven quien bajaba el arma con lentitud, Legolas se acercaba más hasta llegar al chico y tomar su mano.
-Vesperi- pronunció Legolas.

Galaldriel despertó, haora sabía lo que faltaba, se puso una capa, salió del castillo y se dirigió al bosque, paso un rato rodeada por los blancos árboles buscándolo, cundo vio a alguien con capucha negra y aún que cubría su rostro sabía que era el. Se hacerco pero de inmediato el chico saco su espada.
Galaldriel se detuvo y quitó su capucha
-calma, Vesperi-
Vesperi noto que era una mujer y bajo su arma parecía sorprendido pero no era por el echo de que la extraña había pronunciado su nombre sino por el echo de que nunca había visto un elfo
-wou las historias son ciertas eres muy linda -
Arwen sonrió divertida
- Vesperi, Sauron ha regresado he intenta apoderarse de la tierra media-
Vesperi había escuchado un parde historias de ese ente haora más que nunca rumores, pero nunca creyó que escucharía eso de parte de una elfa.
- se a formado un grupo llamado la comunidad del anillo quienes destruirán lo unico que sauron necesita para completar su poder-
Vesperi escuchaba atentamente lo que decía la mujer sabía que los elfos no mentian, y mucho menos inventaban historia.
-Aragorn te necesita- al escuchar ese nombre
Vesperi habrio más los ojos, no creyó volver a escuchar ese nombre
-donde está ?-
- se dirige a Mordor, lleva un día de ventaja-
- debo darme prisa entonces, muchas gracias - le mostró una sonrisa a la mujer y salió corriendo.

Arwen se sorprendió un poco por qué le creyera o que ni siquiera preguntara su nombre, pero ese chico tenía algo diferente, tal vez eso era lo que se necesitaba para lo que estaba por venir.