Darkness Behind The Glow. TRILOGÍA [DESPUÉS DE TÚ MUERTE].

Capítulo 6: Inversión.

Su nuevo trabajo empezó en su casa desde su computadora, Royer solo le mandaba algunas anotaciones y viejos archivos de la empresa para que él rellenara un informe nuevo, se lo mandara a Melanie para que ella lo revisara y lo enviara. No era tan complicado, se la pasaba la mayoría del día leyendo y leyendo archivos y le pagaban por eso.

...

La empresa estaba vacía, no había empleados, la única persona antigua que continuaba del lado de la empresa aún con el pasar de los años era Melanie. La empresa llevaba dos años inactiva por culpa de que su padre solo se había concretado en su increíble carrera de actuación y había descuidado completamente la empresa familiar que en teoría se había heredado y se debía mantener. Aunque realmente no sabía nada acerca de su familia aparte de su madre y su padre, y su madre estaba muy entretenida con su línea de ropa que para su disgusto había sido un fracaso.

La gente odiaba a su madre. Tenían bastante preferencia con su padre, y la actitud de su madre tampoco era la mejor como para que la gente le tomara aunque sea un poco de cariño.

Había heredado la empresa y realmente no sabía que hacer con ella.

Veinte pisos. El primer piso era la recepción, el segundo era de administración general. Los siguientes pisos: tres, cuatro y cinco, eran para la organización del material. Los pisos seis y siete eran los pisos del programa de prácticas. Desde el ocho hasta el doce eran para la organización. Del quince al diecinueve eran de creación y pruebas. Y el último piso era la oficina general. Habían tres pisos inferiores, el -1 era el estacionamiento y el taller, el -2 de construcción y ensamblado, el -3 era de producción y testeo.

Melanie le había sugerido llamar a los antiguos empleados para preguntarles si querían volver a ejercer su puesto en la empresa... Pero de todas maneras no podía hacer nada con la jodida empresa en tan mal estado. Primero debía remodelarla y necesitaba más dinero del que tenía en su poder, no se acercaba ni al monto mínimo. Y su ingreso mensual le alcanzaba para pagar el colegio de Maddi, comprar comida y le sobraba muy poco para tener de ahorros.

No habían dejado dinero, se encontraban a poco de la quiebra. Y se murieron solo para dejarle una responsabilidad que él desconocía.

Creía que necesitaba un milagro para subsistir sin caer en la quiebra. Se había enterado que la ganancia que le podrían dar al vender el edificio de la empresa era algo millonario, pero no sé atrevía a venderla.

Era demasiado dinero pero a la larga esa cantidad no era nada...

Lucas se había ido, Mia ni siquiera le hablaba, y sus padres muertos. Royer y Melanie eran los que aún seguían con él.

—¿Que mierda hago ahora? —susurró. No se sentía bien—. Me dejaste Lucas... —sus ojos se aguaron rápidamente—. Me dejaste solo...

...

Pasó una semana en la que estuvo pensando en cualquier cosa. Royer había estado tratando de consiguirle pero nadie había dado una respuesta. Ni siquiera sabía bien que hacer.

...

Esa tarde había ido a hablar con Santiago. Él debía darle alguna respuesta.

—No tenía conocimiento de eso, la verdad. Es poco dinero, claro, para la vida que están acostumbrados ustedes...

—Solamente la mensualidad del colegio de Maddi son 1000, en algún momento se terminará el dinero.

—Claro... Dijiste que necesitabas dinero para remodelar la empresa ¿Cómo va eso...?

—La cantidad que necesito me parece estúpida, no llegó ni a una parte de eso.

—¿Está tan mal?