★! TW: relaciones homosexuales, alfa & omega, chico con vagina.
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esta historia no es de mi propiedad, su contenido es explícito y no es apto para todo publico, por lo que la responsabilidad recae sobre quien lo lee, favor de evitar hacer denuncias.—¿vas a salir? —preguntó max de forma distraída mientras miraba la televisión con las piernas cruzadas, sergio asintió tomando su celular y su cartera.
—iré a reunirme con mis amigos, carlos insiste en que debería comenzar a salir en citas y me obligó a ir a una doble con él y lando —eso llamó la atención de max que por fin dejó de ver la pantalla y conectó su mirada con la del alfa —dice que charles es un buen omega y quizá debería conocerlo.
—ya veo —dijo max en voz baja tratando de ignorar la incómoda sensación en su pecho y estómago, aquello no le había agradado para nada a él y a su omega, pero no podía decir nada, al fin y al cabo sergio y él eran simples roomates, no más —no llegues tan tarde, planeaba pedir pizza para cenar juntos...
—prometo llegar para la cena, no te preocupes —sergio se acercó hasta a él y acarició sus cabellos despacio, max se contuvo de acurrucarse contra su mano como solía hacerlo cuando estaban juntos —nos vemos luego, cuídate.
—lo haré —el alfa le sonrió antes de salir del departamento dejándolo solo en la misma posición, max suspiró y se dejó caer sobre el sofá viendo hacia el techo.
¿estaba mal sentir celos? no podía evitarlo, sentía una innegable atracción hacia sergio, ese alfa que lo había aceptado en su departamento cuando había comenzado la universidad.
max podía recordar cómo sergio le había ofrecido quedarse en su departamento cuando el omega le había contado que no tenía dónde quedarse porque todo era muy caro o le quedaba muy lejos de su facultad.
las cosas habían salido bien después de todo, al principio había sido un poco incómodo para ambos, pero con el paso del tiempo se fueron acostumbrando a la presencia del otro, comenzando a hacerse cercanos, contando chistes o anécdotas, solían acostarse en el sillón y ver películas cada fin de semana, entonces max se acostaba en el regazo del alfa que repartía mimos sobre el cabello del omega.
los sentimientos de max por sergio comenzaron a desarrollarse a los meses de su estancia ahí, cuando su celo lo alcanzó y sergio en lugar de aprovecharse de la situación y follarlo, corrió a la farmacia más cercana a buscarle suspensores y todo lo necesario para que max pasara su celo a gusto en su habitación, incluso le había pasado algunas prendas para calmar al omega.
cada día sentía que sus sentimientos se hacían más grandes, tanto que comenzaba a dolerle, porque lo más seguro es que sergio no sintiera nada por él y todo fuera unilateral.
y todo se confirmaba ahora que sergio había salido en una cita con un tal charles.
—maldita sea...—susurró mientras ahogaba un grito en un cojín, quizá si no hubiera sido tan inseguro e indeciso habría podido confesar sus sentimientos hacia el alfa, entonces tal vez hubiera tenido una oportunidad con él—soy tan patético.